La ONG venezolana Control Ciudadano afirmó este viernes que “es importante” que “se determine la responsabilidad de los superiores”, tanto civiles como militares, frente a los crímenes y violaciones de derechos humanos previstos por el Estatuto de Roma.
Así se desprende del informe titulado “Venezuela ante la Corte Penal Internacional (CPI). Implicaciones para la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB)”, elaborada por el equipo de investigación y análisis de Control Ciudadano, según recoge un comunicado de la organización.
En el mismo, afirman que “los superiores responsables de crímenes contra derechos humanos en Venezuela estarán bajo la observación de la CPI en caso de concretarse la apertura de una investigación contra Venezuela”.
En febrero de 2018, la CPI abrió un examen preliminar a Venezuela por supuestos abusos a sus fuerzas de seguridad, tanto en las manifestaciones ocurridas desde abril de 2017 como en algunas cárceles donde se habría maltratado a opositores.
La exfiscal Fatou Bensouda adelantó en noviembre del año pasado que existían “fundamentos razonables para creer” que se han cometido crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Bensouda dejó su cargo como fiscal en la CPI el 15 de junio de este año y en su último informe señaló que existe “una base razonable” para creer que en la nación caribeña se cometieron “crímenes de la competencia de la Corte al menos desde el 2017”.
El caso continúa en manos del ahora fiscal Karim Khan, quien tiene previsto iniciar hoy una visita a Venezuela.
Acerca del marco legal interno en materia militar, Control Ciudadano concluye que “no contempla los elementos necesarios para juzgar ‘debidamente’ a los superiores o a aquellos que pudiesen estar involucrados en la comisión de crímenes internacionales”.
Por tanto, prevén “que no será fácil para el Estado venezolano y los mayores responsables militares y civiles, zafarse de la observación realizada desde la CPI o de un eventual inicio de una investigación”.
Al respecto, la presidenta de la organización, Rocío San Miguel, consideró que “el informe es importante para la FANB, pues les recuerda a los efectivos militares la relación entre superiores y subordinados en la cadena de mando”, así como “las responsabilidades de los superiores para el caso de no prevenir los delitos antes de que ocurran”.
E incluso, la responsabilidad “de no sancionar a los subordinados por cometer los delitos después de que hayan ocurrido”.
“Estas responsabilidades no se están observando, de manera sistemática, en el seno de la Fuerza Armada Nacional, ante crímenes atroces”, destacó.
Finalmente, Control Ciudadano recuerda a los militares “que la responsabilidad del superior se mantiene aún en los supuestos de un nuevo cambio de mando”.
“En esos casos, ese nuevo superior, también será responsable por tales crímenes si no adelanta las investigaciones correspondientes y entrega los responsables a la justicia”, finaliza. EFE