Como niños que se rencuentran con su madre luego de un tiempo sin verla, los zulianos empiezan a llegar con emoción y el amor mariano que los caracteriza a la plazoleta de la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá e Iglesia de San Juan de Dios, el lugar donde se ha realizado por años la bajada de la Reina Morena y que en este 2021 se ha adaptado a la nueva normalidad producida por la pandemia de coronavirus.
Por: Versión Final
Con tapabocas con la estampa de la Virgen, franelas identificadas y hasta con envases de gel alcoholado personalizados con la figura mariana, los devotos, en medio de una una leve llovizna, esperan en la adyacencia del santuario zuliano para ingresar a la plazoleta en medio del distanciamiento social y luego de haber presentado su cartón de vacunación, donde comprobaron de tenían las dos dosis de la vacuna contra el Covid-19. Es así como se empieza a desarrollar la tradicional bajada.
En la espera de la celebración litúrgica, prevista para las 5:00 p. m., los creyentes realizan el rosario en honor a la Dama del Saladillo y agradecen por volver a verla descender por el tobogán que parte desde el nicho de la Reliquia, recorre toda la nave central de la Basílica y que culmina en el pórtico de la “casa de todos”.
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