Código Voynich, también conocido como MS408, tiene aproximadamente 234 páginas, está ilustrado con plantas, mujeres y signos astrológicos, pero la verdadera magia está en la escritura y en su misterioso significado.
Por Clarín
Se cree que esta código, que parece compuesto en un híbrido entre elfo y árabe, es la única muestra conocida de este sistema de escritura. Los servicios de inteligencia británicos, el FBI e innumerables investigadores han pasado más de cien años intentando descifrarla, pero hasta ahora nadie lo ha conseguido.
Para los aficionados a los rompecabezas, el encanto de un código no descifrado puede ser extraordinario. Algunos han dedicado toda su vida a resolver casos famosos, como el de los códigos Beale, el de Dorabella o el del asesinato de Tamám Shud.
Sin embargo, descifrar esos códigos supone algo más que una posibilidad de riqueza o satisfacción personal.
Los descifradores de códigos como el gran matemático Alan Turing y Elizabeth Smith Friedman han sido catapultados al estatus de héroes, pero ninguno ha resuelto uno de los casos más atractivos de todos: el manuscrito Voynich.
Para leer más, ingresa aquí