El presidente de Estados Unidos, Joe Biden; el de México, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, se encontrarán el 18 de noviembre en Washington para la Cumbre de Líderes de América del Norte, informó este miércoles el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
“Se trata de la primera reunión presencial del presidente López Obrador con el presidente Biden y el primer ministro Trudeau y será la primera reunión trilateral a nivel de jefes de Estado desde hace cinco años”, dijo Ebrard durante la rueda de prensa matutina del mandatario mexicano.
La Casa Blanca confirmó el encuentro en un comunicado en el que subrayó que espera que los tres países estrechen sus lazos y aborden una nueva etapa de colaboración que tenga como objetivos acabar con la pandemia, mejorar la competitividad y el crecimiento sostenible en la región teniendo en cuenta los retos del cambio climático en la región y compartir una “visión regional para la migración”.
Tras definir esta región como la “más competitiva y dinámica del mundo”, Washington consideró que fortalecer la colaboración entre los tres países es “esencial” para “reconstruir mejor”, revitalizar el “liderazgo” de la región y responder a un número importante de retos regionales y globales, siempre “con respeto por la soberanía de cada uno.
La última cumbre entre los líderes de Norteamérica, conocida como de los “Tres Amigos”, tuvo lugar en 2016 y dejó de celebrarse durante la presidencia de Donald Trump en Estados Unidos (2017-2021).
“Esta reunión, esta cumbre, está programada para el día 18 de noviembre de la semana entrante y tendrá verificativo en Washington”, anunció el secretario mexicano de Relaciones Exteriores.
Según Ebrard, los tres líderes mantendrán una reunión trilateral de cerca de tres horas y posteriormente López Obrador mantendrá reuniones por separado con Biden y con Trudeau de aproximadamente una hora.
Los temas que el Gobierno mexicano pondrá sobre la mesa en la cumbre son la “cooperación para el desarrollo en el sur de México y en Centroamérica”, la integración para “promover la inversión”, prepararse para una “próxima pandemia” y explorar una “recuperación económica más justa”.
Ebrard explicó que esta cumbre, la número nueve entre líderes de Norteamérica, se celebrará en Washington porque le tocaba a Estados Unidos albergarla por orden rotatorio, mientras que la décima será en 2023 en México.
El encuentro tendrá lugar en un momento de tensión por la propuesta de reforma eléctrica del presidente mexicano que limita la participación de empresas privadas nacionales y extranjeras en el sector
En la conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional, López Obrador descartó que Biden saque el tema de la polémica reforma eléctrica que busca aprobarse en México porque es “muy respetuoso”, pero avisó que no le cuesta “ningún trabajo” defender su propuesta ante Estados Unidos.
“No está en la agenda pero si surgiera, nosotros explicaremos en qué consiste la reforma. Queremos que ya no se siga abusando de los consumidores, que no aumenten los precios de la energía eléctrica”, dijo el presidente mexicano.
Esta cumbre será el tercer viaje al extranjero de López Obrador como presidente de México, tras la reunión en Washington con Donald Trump celebrada el año pasado y su participación este mismo martes en el Consejo de Seguridad de la ONU, en Nueva York.
Aunque López Obrador tardó en reconocer el año pasado la victoria de Biden, ambos mandatarios han mantenido una estrecha cooperación en materia migratoria y sanitaria por la pandemia de la covid-19, y han tenido varias reuniones telemáticas y conversaciones telefónicas.
EFE