Una invitación por parte del régimen de Nicolás Maduro al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, al país representó un momento histórico para América Latina. Venezuela sería el primer país de este lado del mundo en ser investigado por un tribunal de justicia internacional.
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Desde el palacio de Miraflores, Khan abrió una investigación formal a Venezuela para buscar determinar la veracidad de los supuestos crímenes de lesa humanidad cometidos desde el 2017, “les pido a todos, a medida que entramos en esta nueva etapa que den a mi oficina el espacio para hacer su trabajo” fueron las palabras del fiscal al final de su intervención en dicho encuentro.
En este sentido nuestro equipo realizó una encuesta para conocer la percepción de los venezolanos ante la decisión de la CPI de iniciar investigaciones al grueso expediente de examen preliminar de crímenes de lesa humanidad y múltiples violaciones a los derechos humanos en el país.
¿Establecer la verdad?
Organizaciones y familiares de las víctimas han levantado su voz exigiendo justicia tras los crímenes cometidos todos estos años por parte del régimen de Maduro. Según lo anunciado por el fiscal de la CPI está investigación busca esclarecer y determinar los delitos cometidos.
Es así como Khan firmó junto a Maduro un memorándum en el que acuerdan que Venezuela adoptara “todas medidas necesarias para garantizar la efectiva administración de la justicia” de acuerdo con los estándares internacionales y con el apoyo y el compromiso de la fiscalía de la CPI.
Asimismo, el 85,7% de los encuestados señaló estar de acuerdo con el memorándum firmado desde el palacio de Miraflores y el 97,7% consideró que en el país si se han cometido violaciones de derechos humanos.
Por su parte el 51,9% de los encuestados cree que con el inicio de esta investigación se evitarán las violaciones de derechos humanos.
El fiscal no permitirá que se politice
El fiscal Karim Khan señaló el pasado miércoles 3 de noviembre que tanto él como su equipo de trabajo no actúan en conformidad con posiciones políticas y que se guían “en los principios de legalidad y el Estado de derecho”.
Además, destacó que son consciente de las fallas que atraviesa y existen en Venezuela, así como “las divisiones políticas” y enfatizó “nosotros no somos políticos”.
Al preguntar a los encuestados si consideran que la investigación sobre el caso Venezuela I será politizado por parte de la CPI el 57,9% lo rechazó, además el 82% consideró que los delitos de lesa humanidad cometidos en el país serán sancionados.
Un paso más a la justicia
Una vez que la CPI anunció el avance de la investigación las reacciones de la opinión pública no se hicieron esperar, “es un paso firme hacia la búsqueda de justicia en el país”. Asimismo, el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó expresó que la decisión “reivindica el derecho a la justicia”.
Y es que el inicio de esta investigación abre las expectativas a las víctimas de detenciones arbitrarias, así como a los familiares de víctimas de ejecuciones extrajudiciales y de presos políticos que han denunciado torturas en las cárceles militares y del servicio de inteligencia venezolanos.
El 88,3% de los encuestados consideró que el anuncio de la apertura de la investigación representa la aplicación de la justicia, mientras que el 11,7% manifestó que la medida es oxígeno para el régimen.
Por otra parte, el 93,2% cree que Maduro y su cúpula no respetará el dictamen de la Corte Penal Internacional en relación al caso.
“Queremos que se sepa la verdad” fueron las palabras de Maduro tras la firma del documento e insistió que “Venezuela garantiza la justicia con instituciones dispuestas a mejorar”. Sin embargo, su cara decía todo lo contrario e indicó que, aunque aceptaba el inicio de la investigación no compartía el criterio de la CPI.
Es evidente como los venezolanos están de acuerdo con la decisión tomada por parte de la Corte Penal Internacional sobre el caso Venezuela I y esperan que la justicia finalmente llegue a todas las víctimas y familiares a quienes se les han violados sus derechos humanos.