Tras protagonizar una remontada memorable, el británico Lewis Hamilton (Mercedes) ganó este domingo el Gran Premio de Fórmula Uno de Brasil y le cortó distancia al líder del campeonato, el neerlandés Max Verstappen (Red Bull), quien fue segundo.
Aunque arrancó en la décima posición, tras una sanción de cinco plazas que coronó un fin de semana de tormento, el vigente campeón escaló posiciones hasta superar en la vuelta 59 de 71 a Verstappen, quien lideraba la competencia desde la largada.
Once vueltas antes de rebasarlo, Hamilton empezó a calentar al público brasileño, rendido ante su talento, con un ataque a su principal rival que terminó con ambos brevemente por fuera del circuito.
El finlandés Valtteri Bottas completó el podio y el 1-3 para Mercedes, ahora con once puntos de ventaja sobre Red Bull en el campeonato de constructores, que las fechas plateadas han ganado de manera ininterrumpida desde 2014.
“¡Qué carrera! El equipo hizo un gran trabajo, Valtteri hizo una gran labor. Con las sanciones, este es el fin de semana de carrera más difícil que he tenido”, afirmó Hamilton, vitoreado por los miles de brasileños que asistieron a la pista paulista.
– ¡Hay pelea! –
Con su sexta victoria de la temporada, el siete veces campeón del mundo redujo de 21 a 14 puntos la distancia que el neerlandés le lleva en la clasificación de pilotos.
A falta de tres Grandes Premios para el final de temporada -Catar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos-, Verstappen tiene 332,5 puntos contra 318,5 de Hamilton. Bottas es tercero con 203.
El primer lugar en el circuito de Interlagos, en Sao Paulo, hogar del legendario Ayrton Senna, carga a Hamilton de gasolina para la recta final de una temporada electrizante.
Además de impedir que Verstappen lograra su tercer triunfo consecutivo, tras los éxitos en Estados Unidos y México, el británico, de 36 años, dio una exhibición de resiliencia en un fin de semana de tormento para él.
Aunque dominó las prácticas y la clasificatoria del viernes, sus tiempos fueron desclasificados a causa de una irregularidad en el alerón trasero móvil (DRS) de su coche, lo que lo obligó a salir en la última posición de la carrera esprint del sábado.
Aun así, remontó quince posiciones y quedó quinto en la tercera y última minicarrera de la temporada. Por la penalidad, este domingo salió en la décima casilla debido a una sanción de cinco plazas impuesta por haber sobrepasado la cuota de cambios de motor de la temporada.
Pese a todo, desde la largada demostró la velocidad que acompañó a los hombres de Mercedes (Bottas conquistó la ‘pole’) en Brasil y mantiene viva la lucha por el título mundial.
– “Ventaja decente” –
Detrás del podio entraron el mexicano Sergio Pérez (Red Bull), el monegasco Charles Leclerc y el español Carlos Sainz (ambos de Ferrari), los franceses Pierre Gasly (AlphaTauri) y Estéban Ocon y su compañero, el ibérico Fernando Alonso (Alpine-Renault), y el británico Lando Norris (McLaren).
“Lo intentamos todo hoy y lo dimos todo. Fue muy divertido, pero al final nos faltó un poco de ritmo. Todavía tenemos una ventaja decente, así que hoy se trató de limitar los daños. Estoy seguro de que volveremos más fuertes en las próximas carreras”, afirmó Verstappen.
El corredor neerlandés, de 24 años, controló hasta donde pudo la superioridad de Hamilton, cuyo sueño de triunfo parecía esfumarse cuando su lugarteniente perdió la primera posición en la salida.
Verstappen rodó con tranquilidad hasta que su adversario empezó a aparecer en sus espejos, apoyado por los brasileños que asistieron a Interlagos, en el primer gran evento masivo en Brasil desde la llegada de la pandemia.
El británico les devolvió el cariño al portar una bandera brasileña en lo más alto del podio, dejar abierta la lucha por su octavo título y protagonizar una válida para la historia.
AFP