Alrededor de 300 jubilados y pensionados de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) y sus empresas tuteladas en Bolívar, se concentraron este jueves en las afueras de la sede principal de la corporación, ubicada en Alta Vista, Puerto Ordaz, para manifestar su inconformidad con los sueldos y exigir mejoras socioeconómicas.
Por Corresponsalía lapatilla.com
El presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionados de CVG matriz, Miguel Espinoza, expresó que a principios de año sostuvieron una reunión con el vicepresidente de la organización, Lino Mora, y hace tres meses con el representante de asuntos laborales, en los que plantearon los problemas y las posibles soluciones, pero hasta la fecha no han recibido respuesta.
Apuntó que en la actualidad devengan un salario entre 2 y 3 bolívares que no les alcanza para cubrir sus necesidades. Es por ello que piden que se realice el ajuste de la pensión (homologación del salario), y les asignen el pago de los distintos bonos que le cancelan a los trabajadores activos.
Mencionó que, una vez más, en compañía con representantes de la Intersectorial de Trabajadores de Guayana (ITG) harían entrega de documento en el que plasman todas sus solicitudes, pero no fueron atendidos.
Entre las peticiones, Espinoza también hizo énfasis en la mejora de la cesta de alimentación. Señaló que a ellos solo le asignan 13 kilogramos, 10 veces menos que a los trabajadores activos.
En referencia al HCM, dijo que lleva suspendido aproximadamente 5 años. Precisó que recientemente la empresa matriz habría habilitado en el edificio de Maxy’s un servicio médico, pero cuestionó la atención asegurando que frecuentemente les dicen que no hay especialistas.
De igual manera, en cuanto a la entrega de medicamentos mencionó que solo lo hacen para pacientes con patología de diabetes y tensión arterial. Sin embargo, no dan la cantidad necesaria.
Por su parte, Cecilio Pineda, miembro de la Intersectorial de Trabajadores de Guayana (ITG), director laboral de la CVG y Secretario General de Sunep-CVG, reiteró que las condiciones laborales de los jubilados y pensionados son “paupérrimas”. Dijo que el salario devengado es de “pobreza extrema”.
Aprovechó de hacer un llamado a las organizaciones internacionales, ya que a su juicio existe violación de los derechos humanos. También exhortó a los trabajadores activos a unirse a la lucha de los pioneros de las empresas básicas de Guayana.