Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de Violencia, apuntó que Venezuela sigue siendo el país con mayor desigualdad en América Latina, pues la leve recuperación económica que se ha dado durante 2021 -derivada de una pequeña reactivación del comercio y de la dolarización transaccional, así como de los sueldos y salarios- ha generado un efecto dual.
Por Banca y Negocios
Por una parte, la mejora de las condiciones de vida de un sector que ahora tiene más acceso a bienes y servicios, y por la otra, más pobreza y desigualdad para otros que quedarán excluidos debido a que sus ingresos no están indexados en dólares y no reciben remesas.
Esta desigualdad puede traer como consecuencia el aumento de delitos y violencia en el país: más robos en transporte, viviendas y negocios; el regreso de las pandillas, así como del secuestro y la extorsión en dólares.
Y lamentablemente también se espera que se mantenga el flujo emigratorio, que incluirá nuevos sectores de la población, especialmente a técnicos, lo que implica mayor fuga de talentos y personal capacitado.
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