Hablar de sí mismo. En eso se ha convertido el trabajo de Rafael David Sulbarán, un periodista venezolano de 40 años, quien precisamente, el hecho de escribir sobre sus compatriotas y de la crisis que él mismo ha experimentado, lo hizo acreedor del Premio Simón Bolívar, el más importante en materia periodística en Colombia.
Por vozdeamerica.com
Confiesa que ejercer el periodismo en Colombia ha “significado un salto grande”.
“No sólo por el hecho de trabajar en otro país, que ya es un logro importante para un migrante. Colombia, sí, sin parpadear, me ha permitido eso, desarrollarme profesionalmente”, agrega orgulloso este venezolano, que salió de su país en 2017 por la crisis económica.
“Prácticamente huyendo”, dice para referirse a las condiciones en su entrada en Bogotá.
“Ya llega un momento en donde uno no podía comer bien, no podía completar las comidas, teniendo trabajo… ya no podía sencillamente mantener mi hogar”, explica Sulbarán.
Aunque tuvo que sortear el desempleo, en medio la pandemia, en Colombia ha desempañado diferentes cargos como reportero, editor y profesor, y ha trabajado para medios tan reconocidos como Blu Radio, la revista Semana, precisamente el medio que publicó las historias que obtuvieron el galardón, e investigaciones para medios independiente como La Liga contra el Silencio. Actualmente, es productor de audio de Acorde Media, una productora de podcast en Bogotá.
Premio Simón Bolívar: inesperado
Sulbarán confiesa que sabía del premio mientras vivió en Venezuela, pero no tenía detalles de la dimensión del mismo.
“Fue una sorpresa, una sorpresa grande porque no lo esperaba. Digamos que uno hace el trabajo para informar como un servicio público, pero tal vez los premios (…) forman parte de todo el ejercicio (…) Para mí es algo muy importante porque, imagínate, muchos periodistas colombianos sueñan tal vez con este premio y que un migrante lo logre es algo valioso”, reconoce.
Sulbarán fue galardonado por el reportaje “Inocencia desplazada” del especial “Hijos de Migrantes”, el cual muestra la difícil realidad de niños venezolanos que cruzan la frontera de su país y recorren tierras colombianas y de Sudamérica para lograr una mejor calidad de vida.
Para leer más aquí