La familia real holandesa lamentó el miércoles haber invitado a 21 personas para el 18º cumpleaños de la futura reina Amalia la semana pasada, muy por encima de lo que exigen las medidas sanitarias.
“La familia (real) estaba convencida de tratar de manera responsable las normas del coronavirus con esta reunión al aire libre y con las precauciones tomadas”, como las pruebas y el distanciamiento social, explicó el primer ministro holandés, Mark Rutte, en una carta al Parlamento.
“El rey me informó de que, tras reflexionar, no era bueno haber organizado esto”, añadió Rutte.
En Holanda, el número de invitados en casa está limitado a cuatro personas.
La reunión se celebró al aire libre en un parque perteneciente al palacio el pasado sábado. A los invitados se les pidió que hicieran una prueba, se les vacunó y también se les pidió que respetaran el distanciamiento social.
La carta no dice cuántos invitados asistieron al evento.
Amalia cumplió 18 años el 7 de diciembre e inmediatamente después, se convirtió en miembro del Consejo de Estado holandés, el máximo órgano consultivo del gobierno.
Las celebraciones en torno al cumpleaños de la princesa Amalia se producen después de una serie de errores cometidos por la monarquía holandesa durante la pandemia, que dañaron gravemente su popularidad.
En octubre de 2020, cuando Holanda acababa de ordenar un confinamiento parcial, la familia real se vio obligada a interrumpir unas vacaciones en Grecia, tras el revuelo que se produjo al hacerse públicos los detalles de la estancia.
Amalia renunció a su asignación anual de 1,6 millones de euros en junio, antes de asumir sus funciones reales.
AFP