Más del 80% de los planteles están en ruinas y un alarmante ausentismo de alumnos signaron reinicio de clases presenciales en la isla de Margarita. Planteles estadales y regionales hicieron un intento por acatar el llamado del régimen de Nicolás Maduro, para aparentar “normalidad” al sistema educativo en medio de la pandemia.
Por Dexcy Guédez La Patilla
Marisela Marcano, docente de uno de los planteles dependientes del Ministerio para la Educación, confirmó que ni siquiera diez niños acudieron al plantel y decidieron devolverlos a sus casas. En algunas de las instituciones dependientes de la Gobernación de Nueva Esparta, solamente acudieron uno que otro docente y parte del personal de limpieza.
La directora de una de las instituciones educativas del Ministerio para la Educación, quien prefirió el anonimato por temor a retaliaciones, destacó que ni siquiera material e insumos de bioseguridad les entregaron para poder atender medianamente el llamado a reincorporarse.
En un alto porcentaje de los planteles se pudo constatar la falta total de servicios de electricidad y agua, debido a la sustracción del cableado y equipos para el suministro de agua. “Durante los dos años de la pandemia no dejaron ni siquiera cables. Los que colocó el Consejo Nacional Electoral para las elecciones del 21 de noviembre también se los llevaron”, denunció Nubia Rodríguez, bedel de uno de los planteles más afectados.
Según indicó la directora de uno de los planteles de Porlamar, municipio Mariño, es imposible retomar las clases con total normalidad debido a la caótica situación en que se encuentra la infraestructura educativa.
Indicó que los alumnos asistirán por grupos entre el martes y jueves, mientras que el lunes será destinado a la limpieza y desinfección de las escuelas.
Los martes asistirán los alumnos de educación inicial, los miércoles primero, segundo y tercer grado, mientras el jueves acudirán cuarto, quinto y sexto grado, entre las 7:30 y 11:30 en el turno de la mañana y de 1:00 a 3:30 en la tarde.