La pandemia del covid tuvo consecuencias que fueron mucho más allá de la salud de la población mundial. Por ejemplo, a la empresa japonesa Sony le provocó serios problemas en la fabricación de su última consola, la PlayStation 5, por lo que tuvo que tomar una drástica decisión.
Por Crónica
La esperada quinta generación de consola insignia de la marca no llegó en el mejor momento. Su lanzamiento se produjo en diciembre del 2020 en un contexto de escasez de semiconductores -también afectó la producción de celulares-, producto de la pandemia del coronavirus, generó serios problemas de stock a nivel mundial.
Como paliativo, la compañía reactivó la fabricación de la PS4, que se esperaba que se dejase de fabricar en 2021, y de esa forma poder ofrecer una alternativa a los usuarios.
Según indicaron desde Bloomberg, la cuarta generación de consola es más barata, sencilla de fabricar y utiliza chips menos complejos. Además, al incrementar sus peticiones de producción permite a Sony tener más poder de negociación y lograr mejores precios en esos procesos.
Una fuente de la compañía confirmó que la producción de la PS4 seguirá en marcha durante todo 2022.
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