Desde hace ocho días pobladores del municipio Medio San Juan, al sur departamento del Chocó, han abandonado sus hogares tras la ola de violencia que ha cobrado la vida de tres personas, entre ellas una niña de 10 años de edad y el secuestro de un hombre, en hechos registrados desde el pasado 10 de enero.
De acuerdo con información del consejo comunitario, una tarde hombres armados, al parecer del ELN, llegaron a la comunidad de Paimadó la Rancha y con ráfagas de fusil atemorizaron y forzaron a la comunidad a reunirse en un punto determinado, allí, se llevaron al líder Nilson Antonio Velasquez Gil, de 51 años de edad, quien días después fue encontrado sin vida.
“Su cuerpo fue encontrado con signos de violencia en una playa sobre el río San Juan tres días después”, señaló el comunicado.
Por su parte, Oliver Moreno, alcalde municipal de Medio San Juan, denunció en Radio Nacional de Colombia que si bien el municipio cuenta con presencia militar esta “es muy poca y no alcanzan a cubrir todo el municipio (…) lo que más le pedimos al gobierno nacional es fuerza pública”, a fin de garantizar la seguridad del territorio.
La denuncia del alcalde se da en medio del confinamiento de 1290 personas de la población de Dipurdú del Guásimo.
“En este momento tenemos una población confinada (Dipurdú) y otra desplazada totalmente (Paimadó La Rancha) las cuales requieren atención integral”, puntualizó el mandatario local al medio.
Con respecto a las otras dos víctimas mortales que ha dejado esta escalada de violencia en la zona, el consejo comunitario general del San Juan informó que “se presume que, en retaliación a esta situación, el 15 de enero, sobre las 5 de la tarde, hombres fuertemente armados al parecer de las AGC, irrumpieron en la comunidad de Dipurdú del Guacimo (Medio San Juan) disparando de manera indiscriminada, dejando como resultado la muerte de Valeria Murillo Murillo de 10 años a raíz de una bala perdida. Del lugar se llevaron al joven Juan de Jesús Lerma Murillo, su cuerpo fue encontrado en una playa sobre el río San Juan”.
“Son nuestros niños, niñas y adolescentes del Medio San Juan los que están pagando los costos de esta guerra”, acotó Elizabeth Moreno, representante legal de Acadesan.
El día 16 de enero de 2022, se presentó un nuevo hecho de desplazamiento forzado de la totalidad de la comunidad de Negría (Medio San Juan), aproximadamente 68 familias (alrededor de 260 personas), principalmente hacia las comunidades de Doidó (Istmina) y Chambacú (Sipí).
“Hasta el momento no se ha comenzado la atención de estas comunidades y nos encontramos en proceso de recaudar la información del censo de las víctimas. Estas comunidades no cuentan con combustible para la movilidad, están sin comida y, por lo tanto, padeciendo hambre”, sostiene el comunicado por parte de Acadesan.
Por su parte, el líder social y defensor de Derechos Humanos Luis Olave, quien meses atrás sufrió un atentado del que salió con vida, manifestó que la guerra entre criminales en la región del Bajo San Juan “nadie la quiere ver en Colombia”.