La condena del líder opositor ruso Alexéi Navalny, que vuelve a ser juzgado en Rusia, es “incompatible con los principios de un estado de Derecho”, declaró el martes en Moscú el jefe de Gobierno alemán Olaf Scholz.
“En lo que respecta a Navalny, mi posición es muy clara y su condena es incompatible con los principios de un estado de Derecho, y ya he expresado esta posición en muchas ocasiones“, dijo el canciller en una rueda de prensa conjunta con Vladimir Putin.
El opositor había recibido tratamiento en Alemania en 2020 tras ser envenenado por los servicios secretos rusos.
Un tribunal ruso comenzó el martes a juzgar al opositor al Kremlin, que lleva más de un año encarcelado y se enfrenta a otros 10 años de prisión.
Los investigadores acusan a Navalny, que ya fue condenado a dos años y medio de prisión, de malversar más de 4,7 millones de dólares en donaciones a sus organizaciones, unos cargos que conllevan una pena máxima de diez años de cárcel.