Una cuidadora de perros ha revelado las impactantes lesiones que le dejaron la piel colgando de la cara cuando fue mordida 800 veces en un ataque de perro feroz.
Por: The Sun
Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Jacqueline Durand estaba lista para celebrar su cumpleaños número 22 solo unos días después de la traumática mutilación en diciembre pasado que la dejó en un coma inducido médicamente.
Ahora está hablando sobre la horrible experiencia mientras revive cómo la mezcla de pastor alemán y boxer-pitbull que estaba cuidando la mutiló tan pronto como abrió la puerta.
Jacqueline fue mordida más de 800 veces, perdió el 30 por ciento de su sangre, fue reanimada varias veces y estuvo en coma inducido médicamente durante una semana, dijo su madre, Shirley Durand, a CBS News .
“Pensé que iba a morir”, dijo Jacqueline a CBS.
Los socorristas la llevaron rápidamente a la sala de traumatología del hospital 37 minutos después de su llegada.
Cuando CBS les preguntó por qué no dispararon a los perros para rescatar a Jacqueline antes, afirmaron que era porque “solo podían ver [sus] piernas y no se dieron cuenta de inmediato del alcance de sus heridas”.
Jacqueline gritaba pidiendo ayuda mientras los perros mantenían a raya a los oficiales, según muestran las imágenes de su cámara corporal.
Hoy, dijo que está lista para mostrar quién es.
“No puedo tener miedo de eso”, dijo.
Sin embargo, todavía está “sin palabras”, le dijo a CBS después de que casi muere.
“Después de cada encuentro y saludo que tuve, siempre sentí lo mismo con esos otros perros y no cambiaron su actitud desde el momento en que los conocí hasta el momento en que fui allí por primera vez”.
Sin embargo, insta a los dueños de perros a “conocer a sus animales y poder comunicarse con sus cuidadores sobre cómo están”.
Los desconsolados propietarios dijeron en un comunicado a CBS que “nunca pondrían a nadie en peligro a sabiendas, y estaban conmocionados por lo que sucedió en [su] casa”.
Sin embargo, el abogado de la familia Durand argumenta que una señal de advertencia en la puerta de entrada sugiere lo contrario.
“… los obispos sabían que estos dos perros habían actuado agresivamente con las personas que llegaban a la puerta principal”.
El letrero decía: “Perros locos. Por favor, no golpeen ni toquen el timbre. En su lugar, llamen o envíen mensajes de texto”.
A pesar del letrero en la puerta, los dueños de los perros afirmaron que nunca mostraron antecedentes de violencia.
“Ninguno”, dijo Justin Bishop a la policía.
Jacqueline había conocido a los perros que la atacaron una vez antes y los describió como “encantadores”.
Todavía quiere trabajar con animales en el futuro y posiblemente convertirse en entrenadora de perros.
Su actitud positiva es una inspiración para su padre.
“El cielo es el límite.”