El tres veces ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, de 85 años, y su actual pareja, la diputada Marta Fascina, de 32, intercambiarán el próximo sábado anillos y promesas de compromiso ante sus invitados, como habitualmente hacen los novios en una boda, aunque la suya será sólo una ceremonia “simbólica”.
El “casi matrimonio” se celebrará en su residencia de Villa Gernetto, una enorme mansión del siglo XVIII en la localidad de Lesmo (norte) y contará con unos sesenta invitados, incluidos los hijos de Berlusconi con sus exmujeres Carla Dall’oglio y Veronica Lario , aunque alguno podría no acudir, revela este jueves el Corriere della Sera.
A pesar de que familiares y amigos muy queridos de Berlusconi han intentando por todos los medios que los “novios” pospusieran la ceremonia en vista de la guerra que se vive en Ucrania, Fascina no estaba dispuesta a retrasarla y más aún dado que no será “un verdadero matrimonio”, como ella quería, según el diario.
La diputada de Forza Italia, la formación política creada por Berlusconi en 1994, no logró convencer a todos los hijos de Berlusconi, opuestos a la boda, motivo por el cual es probable que algunos de ellos no acudan a la celebración que tendrá lugar con la presencia de entre 50 y 60 invitados, entre familiares, amigos y poquísimos políticos.
La ceremonia, que no contará con una gran cobertura mediática, sino sólo con unas fotos oficiales en redes sociales, contará con la lectura de las promesas de amor de los “esposos” y un intercambio de regalos: Berlusconi le ha entregado ya un “magnífico solitario”, mientras que ella le dará un molde las manos de ambos entrelazadas, explica el diario.
Berlusconi y Fascina comenzaron su relación en 2020, cuando los medios hicieron públicas unas fotos de ambos enSuiza. Desde entonces, la pareja ha mostrado su amor en redes sociales y en actos públicos, con muestras de cariño como el beso que compartieron hace diez días durante el partido de fútbol del equipo italiano Monza, del que el magnate es propietario.
Los rumores sobre la posible boda de ambos llevaron al propio Berlusconi a negar en febrero pasado que se fuese a celebrar el matrimonio, aunque anunció una fiesta con sus amigos para festejar el vínculo con la diputada
“La relación de amor, estima y respeto que me une a la señora Marta Fascina es tan profunda y sólida que no hay necesidad de formalizarla con matrimonio. Los rumores que han aparecido en la prensa no son ciertos”, zanjó Berlusconi entonces.
EFE