Turquía ha inaugurado hoy en el estrecho de los Dardanelos un nuevo puente colgante entre Asia y Europa que, con una longitud total de 4.068 metros y un vano entre pilares de 2.023 es el más grande del mundo de estas características.
El bautizado como Puente Çanakkale 1915 conecta Lapseki, en la orilla asiática de los Dardanelos, con la Gallípoli, en el lado europeo.
El nuevo puente intercontinental reducirá el tiempo de cruce de los 30 minutos que se tarda ahora en ferry, a sólo seis.
El nombre del puente y la fecha de su inauguración recuerdan a la victoria de las tropas otomanas en la batalla naval de Çanakkale, el 18 de marzo de 1915, dentro de la campaña de Gallípoli en la I Guerra Mundial.
La connotación histórica es una constante en esta construcción, como lo muestran sus 318 metros de altura, que recuerdan la fecha de la victoria (18 de marzo) contra Francia, Reino Unido y Rusia.
Los 2.023 metros de luz, la distancia entre los pilares, recuerda también que el año que viene se celebra el centenario de la fundación de la República de Turquía, mientras que las torres pintadas de rojo y blanco representan los colores de la bandera turca.
“Siempre hablamos de conectar la Historia y el futuro. Hoy, lo estamos haciendo”, declaró el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan durante la ceremonia de inauguración del puente.
El acto también contó con la presencia de Kim Boo-kyum, primer ministro de Corea del Sur.
La infraestructura ha sido construida por un consorcio de empresas turcas y surcoreanas.
“Vuestros antepasado tuvieron aquí una victoria en 1915, pero este puente unirá Occidente y Oriente y traerá paz y prosperidad”, dijo el político surcoreano.
La obra, que comenzó en marzo de 2018 y finaliza un año y medio antes de lo previsto, supera en dimensiones al puente japonés Akashi Kaikyo, el más largo del mundo hasta ahora.
La construcción, cuyo presupuesto asciende a 3.100 millones de euros (3.410 millones de dólares), es el cuarto puente del país que conecta Europa con Asia.
EFE