La ambulancia que el papa Francisco ha querido enviar a Ucrania ya se encuentra en Lviv (Leópolis) y será destinada al centro regional Salud Materno-Infantil que está recibiendo a enfermos y pacientes heridos de los bombardeos rusos que se están produciendo en varias ciudades del país desde que comenzó la invasión.
El emisario de la ambulancia ha sido el Limosnero Apostólico, el cardenal Konrad Krajewski, en la segunda misión en Ucrania, adonde viajó este fin de semana desde Roma después de que el pontífice bendijera el vehículo el pasado domingo.
“Tengo el privilegio de entregar en nombre del Santo Padre el regalo especial de la ambulancia, que es un símbolo, porque la ambulancia salva vidas. El papa es siempre el que construye puentes, el que trae la paz, así que esta ambulancia es para la gente que sufre, pero también representa el abrazo del Santo Padre”, explicó el purpurado al realizar la entrega, según los medios vaticanos.
Krajewski añadió que “es una forma de decir: Estoy cerca de ustedes, sufro con ustedes, pido y ruego la paz para este país que está en grandes dificultades”.
Uno de los representantes de las autoridades ucranianas aseguró “que se trata de un regalo importante porque el número de refugiados en la zona ha aumentado considerablemente”. “¡Gracias Cardenal Krajewski! Agradecemos al papa Francisco por sus oraciones, por acordarse de Ucrania: ¡nos da fuerza! Queremos que nuestra próxima generación no vea la guerra y esté sana”, añadió según los medios del Vaticano.
El papa ya ha enviado a través de la iglesia de Santa Sofía de Roma, iglesia de referencia para la comunidad ucraniana en la capital, material médico a ese país, mientras que el cardenal polaco es la segunda vez que viaja a Ucrania, pues ya estuvo del 6 al 12 de marzo y visitó Rivne, Zhovkva y otros lugares “para ofrecer ayuda, apoyo y esperanza en nombre de Francisco”.
EFE