El ministro de Asuntos Exteriores, Dmytro Kuleba, llamó a los encargados de las conversaciones con el Kremlin a tomar extremas precauciones: dos enviados de Kiev y Roman Abramovich sufrieron síntomas compatibles con una intoxicación.
Por infobae.com
El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, aconsejó a la delegación de su país que participa en las negociaciones con Rusia en Turquía “no comer ni tocar nada”, ante las sospechas de envenenamiento surgidas en anteriores encuentros.
Los miembros de la delegación presentes en Estambul “no deben comer nada y lo mejor es que eviten tocar cualquier superficie”, afirmó el ministro, en declaraciones al portal Ukrania24.
Según ese rotativo, los síntomas aparecidos en los tres casos fueron ojos enrojecidos, lagrimeo constante y molesto y descamación en la piel de las manos y la cara. Sus vidas no corren peligro y todos ellos evolucionaron positivamente.
Los allegados culparon del pregunto ataque a los sectores de línea dura del Kremlin que, supuestamente, estarían intentando sabotear las conversaciones que buscan frenar la guerra. Otra fuente cercana al empresario dijo que no estaba claro quién estaría detrás del presunto ataque.
En tanto, la BBC también confirmó el hecho, y citó a fuentes cercanas a Abramovich.
Por el momento no ha sido posible determinar si hubo algún agente químico o biológico que haya causado los trastornos.
Abramovich participa asimismo en Estambul en las negociaciones entre Rusia y Ucrania, cuyo fin es tratar de alcanzar un alto el fuego, y que se desarrollarán previsiblemente hasta mañana.