El consultor legal, Mariano de Alba, señaló este jueves que si el régimen de Nicolás Maduro permite que la Corte Penal Internacional (CPI) abra una oficina en Venezuela y que se comprometan a “recibir asistencia técnica”, tendría “sus riesgos en el mediano y largo plazo”.
Por lapatilla.com
“Para la Fiscalía de la Corte es clave poder obtener información directa sobre los crímenes de lesa humanidad, comunicándose con diversos funcionarios, víctimas y familiares. Si decidiera avanzar con su propia investigación, su información y argumentos tendrán más peso”, destacó de Alba a través de la red social Twitter.
También recalcó que “la Fiscalía de la Corte está muy presionada por presentar casos sólidos donde sea muy probable que pueda obtener una condena del acusado”. Por ello, su presencia en el país “podría obtener pruebas más contundentes que le sean útiles en el futuro”.
El fiscal de la CPI, Karim Khan, se reunió con Maduro en el Palacio de Miraflores y anunció la posibilidad de abrir una oficina del organismo de justicia internacional en Venezuela con la finalidad de investigar a las autoridades chavistas y escuchar a las víctimas de violaciones a los derechos humanos por parte del régimen.
Maduro, sin ocultar sus ganas de quedar bien parado ante la CPI, dijo que ve con buenos ojos la decisión y dijo que él y el chavismo son “los primeros interesados en la prevalencia plena de los DDHH”.