La cicuta, una planta venenosa e invasiva que es cada vez más común en los campos y patios traseros de los EE. UU. y Europa, se está extendiendo como un reguero de pólvora y puede causar síntomas similares a los casos más graves de COVID.
Por New York Post
Los efectos de la hierba lavanda y blanca, que se parece al encaje de la reina Ana, se pueden sentir incluso si no la tocas directamente. Jim LeBlond, residente de Madeira, Ohio, se enteró casi fatalmente de esto en mayo pasado después de limpiar su patio trasero.
“Trabajé todo un fin de semana limpiando madreselva y las malas hierbas a su alrededor con una motosierra eléctrica”, dijo LeBlond a Good Housekeeping . “Había sido una primavera húmeda, y la maleza ya estaba por todas partes. Vi muchas flores blancas, pero no pensé en nada”.
Se despertó a las 4 de la mañana siguiente luchando por respirar e hizo que su esposa lo llevara a la sala de emergencias.
Los médicos primero temieron que LeBlond, completamente vacunado, tuviera un caso desagradable de COVID o neumonía y lo ingresaron en la UCI. Sus niveles de oxígeno estaban alcanzando niveles críticos.
LeBlond, que estaba sano y fuerte solo unos días antes, tuvo que ser puesto en coma inducido médicamente y conectado a un ventilador debido a la cicuta.
“Recuerdo que me trasladaron a una habitación”, dijo LeBlond sobre sus primeros días en el hospital. “Pero mi memoria de las próximas tres semanas está totalmente en blanco”.
As his wife, Jeanne, sat tearfully by his side, she feared for the worst.
“Me dijeron muchas veces que quizás no sobreviviera”, dijo.
El médico de cuidados intensivos pulmonares Christopher Hayner finalmente descubrió que el simple hecho de respirar partículas de la cicuta había causado que LeBlond tuviera algo llamado hemorragia alveolar, en la cual, explicó, “los pulmones no pueden hacer su trabajo de llevar oxígeno al torrente sanguíneo como sangre”. se acumula en los sacos de aire… Esencialmente, te ahogas en tu propia sangre”.
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“Las partículas tóxicas de cicuta venenosa en aerosol causaron insuficiencia respiratoria”, continuó Hayner. “Cualquier cosa que puedas tocar, también puedes inhalarla”.
La debilidad que sintió LeBlond durante la terrible experiencia fue insoportable. Pasó 109 días en el hospital y finalmente necesitó una cirugía cardíaca debido a los problemas con sus pulmones.
“Tumbado allí, piensas que deberías poder levantarte e irte a casa, pero no puedes”, dijo.
Lo que es igual de aterrador es que la cicuta, que solía crecer principalmente en la naturaleza, se ha encontrado cada vez más en áreas más pobladas, según USA Today.
“La cicuta venenosa no estaba en ninguna parte, y de repente estaba en todas partes… Ese movimiento me da un poco de miedo porque esta planta es muy tóxica, y [su propagación ofrece] más oportunidades para que los niños jueguen con ella y las mascotas coman eso”, dijo Dan Shaver del Servicio de Conservación de Recursos Naturales de Indiana al medio. “No es una planta que quieras en tu casa o en tu parque local”.
Shaver explicó que la cicuta madura entre junio y agosto de cada verano, y cada planta puede producir hasta 30 000 semillas que se esparcen fácilmente durante el mantenimiento del jardín, como en el caso de LeBlond.
“Los productos químicos están en la savia, pero la savia circula por toda la planta, incluidas las raíces y las semillas, por lo que todas las partes de la planta son tóxicas”, dijo Joe Boggs, quien trabaja para la Extensión de la Universidad Estatal de Ohio como profesor asistente de entomología.
El experto en conservación también aconseja a los jardineros que procedan con cuidado a la hora de erradicar la planta. Si una planta de cicuta ya tiene flores, sugiere cortarlas y embolsarlas.
“Es importante controlarlo”, dijo Shaver. “Pero es algo que requiere mucha reflexión y precaución antes de hacerlo”.