Douglas Rico, director del Cicpc, notificó en redes sociales que fue esclarecido el atroz homicidio de un funcionario de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), quien fue asesinado a traición por unos allegados en Coche, Caracas.
lapatilla.com
Luis Alberto Castro León, de 33 años, funcionario de la PNB, fue hallado calcinado en la carretera vieja La Mariposa, parroquia Coche, municipio Libertador. De inmediato, comisiones de la División de Homicidios iniciaron las pesquisas y esclarecieron que el hecho se trató de un crimen pasional. Así lo reseñó Rico en Instagram.
Como parte de las pesquisas, se realizó un intenso análisis telefónico para saber los números de contacto con los que el funcionario había tenido comunicación el día 16 de febrero, fecha en la que desapareció, cuando se encontraba en Catia. La última persona con la que habló fue con su amigo Gregory Joseph Méndez Suarez, de 35 años, hoy en fuga, quien lo citó en una vivienda de la zona.
Una vez en el lugar, el policía fue sometido por su amigo Gregory, en compañía de Andrés Sánchez y Jorge Luis Miranda González, alias “El Negro”, (estos dos ya capturados) los cuales, portando objetos contundentes lo golpean hasta dejarlo mal herido, para luego propinarle múltiples heridas con un arma blanca y estrangularlo con un mecate.
Los victimarios, al notar que el efectivo se encontraba sin vida, lo metieron en bolsas plásticas y lo ocultaron en una de las habitaciones, hasta altas horas de la noche, donde Jorge y Gregory, arrojaron el celular de la víctima en Petare, mientras que Andrés, intentó desaparecer la moto KLR del occiso.
Posteriormente, los criminales ubicaron al propietario de un Chevrolet Caprice, placa MCH85R, con el fin de que les hiciera una carrera para buscar mercancía para un puesto de frutas donde trabajaban y al llegar al lugar acordado, lo amenazaron de muerte con un arma de fuego para obligarlo a que los ayudara a trasladar el cuerpo de la víctima hasta el sector donde fue hallado. Allí lo rociaron con gasolina y lo incineraron para intentar desaparecer el cuerpo.
Se pudo conocer que Gregory había planificado el hecho por celos, ya que su expareja, antes de irse a España, le confesó que había tenido una relación con el funcionario.
En la actualidad, el delincuente se encuentra en Colombia, donde huyó tres días luego de haber perpetrado el crimen.
Como evidencias, se recuperaron los vehículos involucrados y el celular del occiso.