Tres niños pequeños fueron trasladados de urgencia al hospital después de comer refrigerios mezclados con una sustancia alucinógena que se encuentra en el cannabis.
Por Mirror
Los padres de los niños de un año notaron que sus hijos tenían un “comportamiento letárgico y descoordinado, así como ojos vidriosos e inyectados en sangre”, según el Departamento del Sheriff del condado de Stafford .
Los niños fueron llevados a la sala de emergencias del Stafford Hospital, Virginia.
El personal del hospital reconoció los síntomas y descubrió que los niños pequeños habían estado expuestos al THC, la sustancia psicoactiva del cannabis.
Las investigaciones realizadas por la oficina del alguacil encontraron la misma sustancia en las galletas de peces dorados cerca de las sillas altas en la guardería.
El comandante de la oficina del alguacil de Stafford, Shawn Kimmitz, dijo: “[Los detectives] realizaron una búsqueda en la guardería y recolectaron galletas de peces dorados alrededor de las sillas altas de los niños pequeños.
“Estas galletas fueron enviadas al laboratorio para su análisis y confirmaron la presencia de THC”.
Las investigaciones han comenzado para descubrir cómo las galletas llegaron al centro y fueron encontradas por los jóvenes.
Se notificó a los Servicios de Protección Infantil y la guardería entregó su licencia. Rebecca Swanner, de 60 años, propietaria de la guardería, fue acusada de tres cargos de crueldad y lesiones a niños.
Se entregó a la oficina del alguacil el jueves y fue liberada con una fianza de $2,000. No se han dado actualizaciones sobre los niños afectados.
Anteriormente, un bebé fue trasladado de urgencia al hospital después de tragar una cantidad “significativa” de Crystal Meth antes de perder el conocimiento, según los informes.
El niño de un año quedó luchando por su vida luego del incidente en un apartamento en Gold Coast, Queensland, el 6 de noviembre.
Su madre, de 20 años, lo llevó a un apartamento en Hamilton Avenue en Surfers Paradise, donde consumió la droga metanfetamina, a menudo denominada “hielo”, dice la policía.
La madre y otras tres personas se dieron cuenta de que algo andaba mal después de que el bebé comenzó a enfermarse y luego “perdió parcialmente el conocimiento”.
Los cuatro adultos llevaron al niño a un sótano y luego a la calle, y los transeúntes lo vieron “insensible”, informa news.com.au.
Una ambulancia llevó al bebé al Hospital Universitario Gold Coast en estado crítico. Los resultados de las pruebas del hospital supuestamente mostraron la sustancia ilegal en el cuerpo del bebé, dijo la policía.
Sin embargo, no hay indicios de que al niño se le administraran las drogas deliberadamente y desde entonces se ha recuperado por completo, informa Courier Mail.
La madre del niño, que no fue nombrada, se entregó ayer a la policía luego de una investigación de un mes.