Los servicios de inteligencia de la República Checa han alertado sobre la posible infiltración en Europa de espías rusos con documentos falsos que se colarían entre los refugiados que llegan de Ucrania, informó hoy el influyente diario generalista “iDnes”.
“La actividad de los valedores rusos en la República Checa empieza poco a poco a activarse. Debemos estar preparados para sus nuevos ataques: desinformación masiva y uso de la quinta columna“, dijo el director de los Servicios de Seguridad e Información (BIS), Michal Koudelka.
El objetivo de los espías, según el jefe del contraespionaje checo, es “cuestionar la invasión de Ucrania y difundir propaganda prorrusa“.
El BIS no ha confirmado oficialmente hasta ahora la supuesta nueva oleada de agentes de Moscú que según Koudelka podría hallarse entre los que huyen de la guerra.
El funcionario de seguridad reconoció que la actividad de inteligencia rusa ha sido puesta a prueba por la drástica reducción de los cuadros de la embajada efectuada el año pasado.
Hace un año, la República Checa acusó a los servicios de inteligencia rusos de haber saboteado en 2014 unos arsenales checos para impedir que las armas que almacenaban llegaran a Ucrania, cuyo Gobierno se enfrentaba a rebeldes separatistas prorrusos en la región del Donbás.
En base a esa acusación el Gobierno checo expulsó por espionaje a dieciocho trabajadores de la embajada rusa, y luego ambos países igualaron el número de sus diplomáticos y personal local en sus legaciones diplomáticas.
Desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania, la República Checa ha acogido a más 300.000 refugiados de ese país, la mitad de ellos son menores de edad.
Con información de El Heraldo España