Julio Castellanos: La voz de los trabajadores

Julio Castellanos: La voz de los trabajadores

Esta semana el Consejo Legislativo del Estado Carabobo (CLEC) efectuó un debate con motivo de la conmemoración del Día del Trabajador, la fracción oficialista no sorprendió con sus discursos dado que estuvo a punto de decir que “Venezuela se Arregló”. Ante ese ejercicio retórico de verse el ombligo, el legislador Franmi Hernández, tomó la palabra en representación de la fracción de la Unidad y sus palabras fueron un cable a tierra, fue la voz de los trabajadores y obreros en el parlamento regional.

En sus palabras, “los trabajadores tienen salarios de hambre y todos los días lo evidencian al efectuar sus compras”, asimismo destacó que la canasta básica, conforme a diversos estudios, se sitúa en 500$ mensuales para satisfacer las necesidades integrales de una familia de 5 miembros, este monto es inalcanzable para los trabajadores y obreros. Los mismos estudios calculan que puede establecerse una “canasta de sobrevivencia”, aproximadamente 35 o 40$ semanales, para que una familia pueda sino alimentarse al menos “sobrevivir”, pues bien, tampoco pueden los trabajadores acceder a esa canasta con el salario mínimo vigente, ni con las pensiones vigentes, ni con todos los bonos sumados.

Este cuadro de urgencia explicado por Franmi Hernández, ante la mirada de los legisladores oficialistas, determinó una sugerencia del diputado adeco “es necesario adecuar de forma inmediata el ingreso de los trabajadores a la realidad económica y social del país, al menos para que puedan acceder a la canasta de sobrevivencia, es decir, aproximadamente 200$, y de esta forma cumplir progresivamente con el mandato constitucional de garantizar un ingreso que satisfaga las necesidades de los ciudadanos”.





El 1 de Mayo de este 2022 nos hace recordar que cumplimos varios años sin diálogo tripartito, sin contratos colectivos, sin libertad sindical y con absoluta negación del derecho a huelga. Los trabajadores y obreros están pagando con su sudor, con sus penurias y su hambre la rumba sin fin de los poderosos de este país. El joven legislador de la Unidad no se guardó nada, al pan pan y al vino vino, desde este espacio lo reseñamos porque, como toda Venezuela lo sabe, existe censura en la mayoría de los medios de comunicación y es difícil que la gente pueda enterarse de la lucha constante de los demócratas por restituir el Estado de Derecho en el país. Hoy los trabajadores y obreros deben saber que su voz se escucha en el parlamento regional, pero también su grito debe retumbar en la calle en exigencia de un salario y pensiones dignas. Hoy los carabobeños no piden un “Dracufest” piden un “Dracuaumento” salarial.

Julio Castellanos / [email protected] / @rockypolitica