Pacientes renales “pasan las de Caín” por deficiencias en unidad de diálisis en Maturín

Pacientes renales “pasan las de Caín” por deficiencias en unidad de diálisis en Maturín

 

 





 

 

Fallas en la distribución de agua y aires acondicionados deficientes, son algunas de las irregularidades que denunciaron pacientes y familiares de la Unidad de Diálisis Care, ubicada en el sector Las Avenidas de Maturín. El centro de salud donde son atendidos cerca de 150 pacientes presenta graves carencias, al punto que los enfermos deben “hacer la vaca” para comprar gasolina para la cisterna.

Por Corresponsalía lapatilla.com

Manifestaron que a pesar de que “reparan” los aires acondicionados con cierta regularidad, los equipos vuelven a fallar, y en medio del calor los pacientes reciben su sesión de diálisis. Sin embargo, algunos se han descompensado, desmayándose o presentado subidas o bajadas de tensión.

Yeniré Lugo, paciente de esta unidad, señaló que ante las fallas en la distribución de agua para el tanque de 10 mil litros, deben colaborar y reunir para pagar la gasolina. Situación similar ocurre con los aires para que sean reparados.

 

 

“Los mismos pacientes somos los que colaboramos para que reparen el aire y también para el agua que alcanza solo para un solo día por los tres turnos. Hay que sumarle que nos piden traer cloro y vinagre para hacer la limpieza de las máquinas y muchos no tienen”, expresó Félix Morocoima, otro paciente afectado.

Los enfermos renales añadieron que cada 15 deben hacerse exámenes y estudios especiales. Tal es el caso de Francisco Buttó, quien desde hace 10 años está en lista de espera para un trasplante de riñón y solo para sus estudios requiere 600 dólares, y a pesar de haber solicitado ayuda al gobierno chavista de Monagas, esta nunca llegó.

“Queremos que la ayuda para los exámenes y estudios sea una realidad, porque uno se cansa de meter cartas a la alcaldía y a la gobernación, y no obtiene respuesta. Asimismo, que sea constante el suministro de agua, porque por un día que uno no se dialice, corre el riesgo de complicarse. Hay pacientes que tienen hasta dos años con un catéter, pero no han podido hacerse la fístula que cuesta 500 dólares y por eso se han infectado”, manifestó Buttó.