El veterano político Ranil Wickremesinghe juró este jueves como nuevo primer ministro de Sri Lanka, en un momento de aguda crisis y masivas manifestaciones.
Wickremesinghe, de 73 años, juró ante el presidente Gotabaya Rajapaksa, que se enfrenta a pedidos populares de renuncia a raíz del agravamiento de la crisis económica que sacude desde hace meses a esta isla de 22 millones de habitantes al sur de India.
Sri Lanka sufre escasez de alimentos, carburante y medicamentos y la economía quedó al borde del colapso después de que declarase en abril la suspensión de pagos de la deuda.
Las frecuentes carencias de todo tipo provocan manifestaciones diarias.
El nuevo primer ministro -que ha ejercido este cargo en cinco oportunidades- tiene una dura tarea a la hora de aprobar cualquier legislación en el parlamento.
“Probablemente el gabinete sea nombrado mañana”, dijo a la AFP Sudewa Hettiarachchi un portavoz del presidente.
El miércoles, en su primer discurso desde el inicio de la crisis Rajapaksa atajó cualquier llamado a que renuncie y prometió que el nuevo gobierno tendrá más poderes ejecutivos.
“Voy a nombrar un primer ministro que va a liderar la mayoría parlamentaria y la confianza de la gente”, afirmó el mandatario.
El ex primer ministro Mahinda Rajapaksa, hermano del presidente, renunció el lunes después de que sus partidarios atacaron a manifestantes pacíficos.
Este enfrentamiento dejó al menos nueve muertos y más de 225 heridos, según la policía.
Un tribunal de Colombo prohibió la salida del ex primer ministro, de su hijo Namal y 15 de sus aliados durante el transcurso de la investigación.
Este jueves, las autoridades levantaron temporalmente el toque de queda para permitir que la población acopie productos de primera necesidad, pero la prohibición fue reinstaurada seis horas después.
Wickremesinghe es considerado como un reformista orientado a Occidente que puede llevar a cabo con soltura las negociaciones del rescate pedido al Fondo Monetario Internacional.
“Su nombramiento como primer ministro y la rápida formación de un gobierno inclusivo son los primeros pasos para hacer frente a la crisis”, dijo la embajadora estadounidense en Sri Lanka, Julie Chung, en Twitter.
El principal partido de oposición, la formación SJB fue invitado inicialmente a liderar un nuevo gobierno, pero su líder Sajith Premadasa insistió en que el presidente debe dejar el poder.
En los últimos días, el partido se dividió y una decena de legisladores opositores prometieron apoyar a Wickremesinghe.
EFE
Dimite el primer ministro de Sri Lanka tras varias semanas de protestas