Elon Musk ha vuelto a poner este viernes en vilo a los inversores de Twitter (-8,23 %) después de asegurar primero que suspendía temporalmente la compra de la plataforma, que anunció por cerca de 44.000 millones de dólares, y solo dos horas después rectificar y escribir que seguía comprometido con su adquisición.
“El acuerdo de Twitter queda suspendido temporalmente a la espera de detalles que respalden el cálculo de que las cuentas falsas y de spam representan menos del 5 % de los usuarios”, escribió Musk a las 5.44 hora de Nueva York (9.44 GMT) en un mensaje, publicado por supuesto en su cuenta de Twitter.
Su mensaje iba acompañado de una noticia que aseguraba que Twitter calcula que sus cuentas falsas representan menos del 5 % de las “usuarios diarios monetizables”, por lo que su comentario dejaba claro que el empresario no daba credibilidad a las cifras ofrecidas por las compañía.
Según el acuerdo alcanzado el mes pasado entre la empresa y el magnate, en caso de que una de las partes rompa el pacto comercial, esta deberá pagar a la otra 1.000 millones de dólares.
UN TSUNAMI BURSÁTIL
La reacción no se dejó esperar y casi inmediatamente después de la publicación de sus palabras, los títulos de Twitter cayeron en las operaciones electrónicas anteriores a la apertura de la Bolsa de Wall Street casi un 20 %, hasta rondar los 36,5 dólares por acción.
Además, en apenas dos horas el mensaje generó más de 10.000 comentarios y fue retuiteado más de 16.000 veces.
La polvareda levantada por el hombre más rico del mundo sobre la empresa que quiere comprar no empezó a despejarse hasta que a las 7.50 hora local (11.50 GMT) el propio Musk intervenía en la discusión desatada en la red social para asegurar: “Todavía comprometido con la adquisición”.
Tras esta segunda declaración, las acciones empezaron a recuperarse de la caída, aunque justo después de la apertura de Wall Street seguían perdiendo un 9,92 % o 4,47 dólares, hasta marcar 40,61 dólares por título.
Dos horas y media después del arranque de la bolsa, las acciones seguían perdiendo un 8,23 % respecto al cierre de la jornada del jueves.
LA DEPRECIACIÓN DE TWITTER
Musk ofreció comprar Twitter pagando 54,2 dólares por cada acción, cuyo valor está ahora en torno a los 41 dólares.
Es decir, que en estos momento la empresa vale en torno a un 24 % menos de los 44.000 millones de dólares que Musk se comprometió a pagar, por lo que algunos analistas piensan que el magnate estaría buscando un pretexto para renegociar el acuerdo.
El fundador de la compañía de vehículos eléctrico de lujo Tesla debe aportar 21.000 millones de dólares de su bolsillo y 23.000 a través de préstamos bancarios.
En las últimas semanas, varios fondos de inversión y otros millonarios se han comprometido a aportar 7.000 millones de dólares de los 21.000 millones que Elon Musk se comprometió a pagar de su propio bolsillo.
Entre los magnates que respaldan a Musk están el cofundador de Oracle Lara Ellison, la firma financiera Sequoia, la plataforma de intercambio de criptomonedas Binance y el príncipe saudí Ali Walid bien Talal, según un documento aportado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés).
El empresario había anunciado que su intención era sacar de la bolsa a la compañía una vez hubiera concluido la operación de compra y que pretendía también ocupar el cargo de consejero delegado (CEO), según adelantó en su día el canal CNBC, al menos durante “unos pocos meses”, y que pasados tres años la vendería de nuevo.
También dijo que levantaría el veto en la red social al expresidente estadounidense Donald Trump, cuya cuenta permanece cerrada desde el asalto al Capitolio por parte de miles de sus seguidores en 2021.
Twitter ganó 513 millones de dólares (más de 490 millones de euros) en el primer trimestre del año, lo que supone siete veces más que un año antes (un 655 % más), impulsada por la venta de su negocio de publicidad en los celulares MoPub. EFE