El psiquiatra suizo Carl Gustav Jung definió a una persona introvertida como aquella que suele usar su energía psíquica para mirar hacia adentro. En el lado opuesto, los extrovertidos son quienes buscan el contacto intenso con el mundo exterior. En el imaginario general, si se habla de un líder exitoso, se tiende a pensar en alguien que actúa con rapidez, de personas “de acción” y con fluida interacción con los demás. En definitiva, de personas extrovertidas.
Por infobae.com
La doctora en psicología Marti Olsen Laney afirmó en su libro The Introvert Advantage: How Quiet People Can Thrive in an Extrovert World (La ventaja introvertida: cómo la gente tranquila puede prosperar en un mundo extrovertido) que el 75% de la población mundial es extrovertida. Entonces, hay buenas probabilidades de que muchos líderes sean extrovertidos. Pero, además, el ideal de personalidad en la sociedad es la audacia, la sociabilidad y sentirse cómodo siendo el centro de la escena. Las personas más admiradas suelen ser aquellas que se desenvuelven en público de una manera carismática y sin temor a exponerse.
Como indica Gareth Cook, periodista ganador del Premio Pulitzer, los introvertidos tienen mucho que ofrecer. Un estudio publicado por la Oficina Nacional de Investigación Económica de EEUU así lo confirma. Los autores del estudio escucharon conferencias telefónicas y analizaron los patrones lingüísticos de 119 directores ejecutivos: 28 de empresas tecnológicas y 91 de empresas públicas. Los hallazgos iniciales sugieren que los directores ejecutivos reservados están conectados, de alguna manera, con un resultado final más sólido.
Jennifer B. Kahnweiler , especialista en liderazgo y autora de The Introverted Leader (Los líderes introvertidos) dijo en un artículo para Forbes que el 40% de los ejecutivos se consideran introvertidos. Esa es una representación bastante significativa considerando que los introvertidos sólo representan el 25% de la población en general. Claramente, los líderes introvertidos deben estar haciendo algo bien, estimó.
Entonces, ¿qué secreto esconde el carácter de los introvertido? ¿tiene que ver esto con el éxito de los líderes?
Aquí las claves de lo que pueden aprender los líderes de las organizaciones de 5 de los más destacados conductores introvertidos.
Warren Buffett
El gurú de las inversiones, multimillonario y filántropo es conocido como el “Oráculo de Omaha”. Buffett es uno de los hombres más ricos del mundo y un líder financiero respetado. El mismo aseguró en un documental de Bloomberg que su éxito se debe en parte a que le da un sentido concreto a lo abstracto: “Si observas el mercado como si compraras partes de negocios, podrás ver cuándo el mercado está equivocado”.
Según quienes han estudiado la personalidad pública de Buffett, su introversión es una parte fundamental de quién es él y representó fortalezas y desafíos para lo que fue su ascenso al éxito. La más valiosa de esas fortalezas bien puede ser la capacidad del financista para comprender lo abstracto. Andy Hinds , en su artículo Warren Buffett: El introvertido más rico del mundo, dijo: “Al mirar a través de los números a la realidad subyacente, Buffett ha podido volar en contra de la sabiduría convencional y superar constantemente al mercado”.
El psicólogo de la Universidad de Harvard Randy Buckner dijo en 2012 que “los introvertidos muestran una mayor concentración de materia gris que sus contrapartes extrovertidos en áreas del cerebro (la corteza prefrontal) que controlan la toma de decisiones y el pensamiento abstracto. La capacidad de Buffett para dominar conceptos abstractos, como el mercado de valores, probablemente esté relacionada con su introversión natural”.
Aunque ser introvertido, según los especialistas, fue un rasgo a favor para su carrera de negocios, algunas de esas mismas características significaron para él en obstáculos. En una entrevista, Buffett dijo que “tenía el intelecto para los negocios, pero no la personalidad… Tuve que aprender a comunicarme mejor con la gente, particularmente en grupos. No podía pasarme la vida aterrorizado de hablar en público”.
Hinds dijo que el empresario trabajó para superar esta dificultad. Por ejemplo, tomó los seminarios de Dale Carnegie sobre Cómo ganar amigos e influir en las personas. “Hizo lo que haría cualquier introvertido metódico, analítico y motivado: investigó el problema y estudió la manera de salir de él”, aseguró.
Hoy, Warren Buffet es una figura pública muy conocida que habla con confianza y comodidad en apariciones en televisión y ante grandes audiencias en vivo.
Entonces, una de las enseñanzas que aporta Buffett a los líderes introvertidos es aprender a hablar en público.
J. K. Rowling
La mundialmente famosa autora de la saga Harry Potter siempre aseguró que escribió las novelas del pequeño mago porque deseaba pasar tiempo a solas con sus pensamientos y reveló que la historia nació cuando se encontraba atrapada en un tren que estaba retrasado.
En entrevistas con la prensa, afirmó que en ese momento no llevaba un bolígrafo para poder escribir, pero con el tiempo lo consideró algo bueno. “Simplemente me senté y pensé durante cuatro horas mientras todos los detalles burbujeaban en mi cerebro, y este chico flacucho, de cabello negro y anteojos que no sabía que era un mago se volvió cada vez más real para mí”.
Según Adam McHugh, perteneciente al emprendimiento Quiet Revolution, que apoya y orienta en los negocios a personas introvertidas, afirmó: “La creatividad a menudo parece provenir de una conexión profunda con nuestro mundo interior. Debajo de la superficie hay chispas de imaginación, esperando encenderse. Debido a que hacemos nuestro mejor trabajo en soledad, los introvertidos creativos pueden depender menos de las normas establecidas y ser más capaces de ver y escuchar cosas nuevas”.
Lo mismo que en el caso de Buffett, la introversión de Rowling parece, de alguna manera, haberla colocado en la cima de la literatura infantil y la hizo ganar millones de dólares, pero también le generó obstáculos. Entre las primeras ideas en torno del niño mago durante aquel retraso de su tren y la publicación de Harry Potter y la piedra filosofal, el primer libro de la saga, su vida tuvo muchos sinsabores. Murió su madre, se mudó a Portugal junto a su marido, de quien luego se divorció en no muy buenos términos, y debió criar sola a la hija de ambos en una situación económica muy precaria. En medio de ese panorama, sufrió un cuadro depresivo.
Como explicó la psicóloga y abogada Valerie Soleil en un artículo en la publicación Learning Mind, estudios recientes han demostrado que las personas introvertidas tienen una alta probabilidad de tener síntomas de depresión. Por lo tanto, es posible que el carácter introvertido de Rowling la haya llevado a tener estados depresivos en el marco de la etapa más dura de su vida. Soleil vinculó la introversión con la ansiedad social y la depresión.
En su discurso como graduada honoraria de la Universidad de Harvard, en 2008, Rowling dijo: “El fracaso significó un despojo de lo que no era esencial. Dejé de simular que era otra cosa que lo que era y comencé a dirigir toda mi energía a terminar el único trabajo que me importaba”.
Estar enfocada y perseverar le permitió sortear los obstáculos externos y superar sus luchas internas. Esto sumado a su creatividad dieron como resultado su obra literaria.
La enseñanza para los líderes introvertidos que puede aportar Rowling es el enorme potencial que tienen para enfocarse en una causa que a cada uno le importe y avanzar sin fijarse en los obstáculos de alrededor.
Steve Wozniak
El cofundador de Apple escribió en su autobiografía iWoz: Computer Geek to Cult Icon (¡Woz: de geek informático a icono de culto): “La mayoría de los inventores e ingenieros que he conocido son como yo: son tímidos y viven en sus cabezas. Son casi como artistas. De hecho, los mejores de ellos son artistas. Y los artistas trabajan mejor solos cuando pueden controlar el diseño de un invento sin que muchas otras personas lo diseñen para marketing o algún otro comité. No creo que el comité haya inventado nada realmente revolucionario. Si eres ese ingeniero raro que es inventor y también artista, te daré algunos consejos que pueden ser difíciles de seguir. Ese consejo es: Trabaja solo”.
Para una escritora, como es el caso de Rowling, trabajar sola es sencillo porque los autores son los únicos responsables de escribir sus manuscritos. Pero, en el mundo de los negocios es ampliamente aceptado que debe se debe trabajar en grupo y es inevitable interactuar con los compañeros de trabajo.
Wozniak con su talante introvertido no hubiese podido crear una empresa como Apple actualmente, pero rindió sus frutos su asociación con Steve Job. Mientras él cumplió a la perfección su papel de extrovertido, Wozniak se dedicó a trabajar solo en la programación, que es su especialidad. Juntos pudieron hacer de esa compañía lo que es hoy.
La especialista en márketing Zoe Goodacre escribió en un artículo de Forbes: “El negocio se trata de equilibrio. Se trata de garantizar que se maximice la contribución de todos los que tienen algo para dar. Los introvertidos son tan importantes para su negocio como los extrovertidos. Y las asociaciones son mejores que las empresas solitarias, para todos los involucrados”.
Wozniak y Jobs encontraron un equilibrio que funcionó: juntos definieron una nueva tecnológica que utiliza el mundo entro.
Lo que los líderes pueden tomar como ejemplo de Wozniak es su sabiduría de hallar un socio para equilibrar las debilidades que se pueda tener para encarar un negocio. Los introvertidos funcionan mejor en interacciones uno a uno o en grupos pequeños. Trabajar con un socio de confianza será una salida para enfocarse en su creatividad, intereses y habilidades.
Barack Obama
Aunque puede parecer lo contrario, el ex presidente de Estados Unidos es un líder introvertido. En ocasiones el dirigente demócrata fue cuestionado porque supuestamente actuaba con superioridad o distancia de las personas, pero también se le reconocieron sus habilidades diplomáticas y su consideración con los demás.
El columnista de The New York Times David Brooks dijo: “Ser dirigido por Barack Obama es como ser pregonado a la batalla por Miles Davis. Él te hace querer sentarte y discernir”. Además, destacó la capacidad de Obama para ver los problemas desde muchos puntos de vista y su voluntad de delegar, promoviendo las contribuciones de los demás.
Según Olsen Laney, la consideración, la diplomacia y la empatía son rasgos comunes de los introvertidos. “Muchos introvertidos ven el panorama general de cómo todos estamos interconectados, por lo que les preocupa cómo sus acciones afectan a los demás”.
Como en los casos anteriores, su carácter introvertido le dio ventajas en algunos aspectos de su gestión, pero también le impuso obstáculos, ya que ser un dirigente político le impuso estar constantemente en el centro de la atención.
Según Olsen Laney la introversión se define, en su nivel más fundamental, por la forma en que se deriva la energía del introvertido. Mientras que los extrovertidos obtienen energía de las interacciones sociales, los introvertidos gastan energía en las interacciones sociales. Deben pasar tiempo a solas para recargarse antes de poder volver a participar socialmente.
Entonces, ¿cómo pudo el presidente Obama superar 8 años en la Casa Blanca en medio de constantes demandas políticas y sociales? Según Damon Brown, experto en la preparación de líderes, incorporó tiempo en cada día para trabajar solo. Según dijo, cada noche, después de compartir la cena con su familia a las 6,30 p. m., se retiraba a su oficina privada en la residencia de la Casa Blanca para trabajar de 4 a 5 horas en soledad. Era su espacio para recuperarse de las exigencias sociales del día y actualizar el trabajo que requería toda su atención.
Esto es lo que los líderes pueden aprender de un liderazgo introvertido como el de Obama: Priorizar y planificar tiempo a solas para trabajar o solamente para reponer la energía que le demanda estar en público. La soledad es necesaria para mantener la salud mental y la productividad.
Bill Gates
El cofundador de Microsoft y creador de la fundación benéfica Bill y Melinda Gates condujo al mundo a la era de las computadoras domésticas.
También es un líder introvertido, a pesar de su larga participación pública de los últimos años, ya retirado de la compañía, pero al frente de la Fundación.
Gates recomendó, en diálogo con ABC, capitalizar las fortalezas de un introvertido de la siguiente manera: “Si eres inteligente, puedes aprender a obtener los beneficios de ser introvertido, lo que podría ser, por ejemplo, estar dispuesto a salir por unos días y pensar en un problema difícil, leer todo lo que puedas, esforzarte mucho para pensar en esa área”.
El creador de Microsoft también encontró otras virtudes en la introversión: la voluntad de pasar tiempo a solas reflexionando sobre un problema y abordar problemas complejos y detallados. En el capítulo del libro de Olsen Laney sobre las personas introvertidas y su desempeño en el lugar de trabajo confirmó el análisis de Gates al advertir que los introvertidos “se destacan por su capacidad para abordar problemas complejos y detallados en el lugar de trabajo y se contentan con trabajar en soledad (preferiblemente sin interrupciones)”.
Al respecto, Gates continuó: “Luego, si se te ocurre algo, si quieres contratar gente, emocionarlos, construir una empresa en torno a esa idea, será mejor que aprendas lo que hacen los extrovertidos y aproveches ambos conjuntos de habilidades para tener una empresa que prospere tanto como en el pensamiento profundo y la construcción de equipos y salir al mundo a vender esas ideas”.
De todas formas, admitió que generar emoción y autopromoción no es el dominio natural del introvertido. Sin embargo, son necesarios para que un nuevo negocio despegue. Su solución es aprender a imitar el comportamiento extrovertido para poder ser el animador que necesita esa gran idea.
Esto es, por supuesto, más fácil decirlo que hacerlo. Una persona es introvertida como resultado de una química cerebral no es algo que se pueda cambiar completamente, aunque se puede aprender de forma adaptativa.
Entonces, Gates deja esta enseñanza a los líderes: Se debe aprender a trabajar en colaboración de manera efectiva, ya que las ideas de negocios por más que sean brillantes no es posible que prosperen al menos que se las comparta.
Resumiendo, estas son las habilidades que los líderes introvertidos pueden aprender de estos 5 ejemplos de éxito:
-Desarrollar habilidades para hablar en público
-Concentrarse en el trabajo significativo para poder superar los tiempos difíciles
-Trabajar con un socio que equilibre las debilidades del carácter dentro del negocio
-Programar un tiempo de tranquilidad para recargarse todos los días
-Fortalecer las habilidades de networking