Este lunes 23 de mayo, el expresidente de Colombia, Andrés Pastrana, lanzó una dura acusación a través de una carta abierta dirigida al presidente Iván Duque, en la cual expresa: “Las relaciones de funcionarios responsables del proceso electoral, del registrador que no constituye garantías para unas elecciones limpias, y del candidato Petro con Indra deben aclararse de cara a Colombia y el mundo”, y concluye afirmando que: “El golpe de Estado está dado, señor presidente. Por el bien de Colombia, deshágalo”.
El golpe que denuncia Pastrana no es otro que el fraude electoral, preparado por el Foro de Sao Paulo, el cual contaría con varias etapas.
La primera fue aterrorizar a los colombianos con las protestas vandálicas del año pasado. La segunda: posicionar a Petro como el candidato más favorecido por el pueblo, inflando para ello las encuestas. La tercera etapa: asegurar el control de los jurados en las mesas de votación. Cuarta: garantizar la contratación de la empresa española Indra, para que ésta cuente los votos. Y la quinta: lograr que la auditoría esté a cargo de una empresa costarricense, sancionada y sin experiencia, como lo es DataSys.
Respecto a esto último, la senadora María Fernanda Cabal denunció públicamente este lunes que DataSys: “Tiene experiencia en asistencia técnica y asesoría en sistemas y servicios electrónicos y montaje, en seguridad privada y seguridad electrónica, comercio, agricultura, ganadería, industria, pero que no se menciona nada relacionado con auditoría electoral”.
Pero además, añade Cabal, “DataSys es una empresa costarricense cuya única experiencia ha sido en Honduras, donde fue sancionada por el gobierno en 330.000 dólares por incumplimiento de contrato”.
La guinda de este explosivo cóctel, es que el marxismo internacional está movilizado para blanquear un eventual fraude a favor de Petro, llevando a Colombia unos observadores internacionales totalmente parcializados y pertenecientes al Foro de Sao Paulo, el Grupo de Puebla y los grupos comunistas españoles; acusando a sus adversarios de justamente todo lo que ellos están dispuestos a hacer.
En este sentido, según una reseña de el diario El País, un “grupo de legisladores y figuras públicas de más de 20 países ha expresado este lunes -a través de una carta- su preocupación sobre la creciente amenaza de violencia, asesinato e injerencia de cara a la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Colombia”.
Estos legisladores y figuras públicas destacan en la misiva “las amenazas contra Gustavo Petro y su candidata a vicepresidenta, Francia Márquez. La campaña del aspirante del Pacto Histórico suspendió este mes una gira por el Eje Cafetero ante la amenaza de un grupo paramilitar que, según información que manejaban, planeaba atentar contra su vida”.
Pero al revisar quiénes son estas “figuras” todo queda claro: Mónica Valente, Secretaria Ejecutiva del Foro de São Paulo; el expresidente ecuatoriano Rafael Correa; el diputado de Podemos, Pablo Echenique; el académico norteamericano marxista, Noam Chomsky; y el abogado español de las Farc, Enrique Santiago, entre otros.
Así las cosas todo apunta a que la mesa está servida, y el golpe está dado, como afirma Pastrana. Pareciera que Petro no necesita de los votos para ser declarado ganador de los comicios presidenciales. ¿Bastará para ello que se ponga en marcha la maquinaria fraudulenta del Foro de Sao Paulo?