Salvador Ramos, el tirador escolar adolescente de Texas, vivía con sus abuelos, quienes no tenían idea de que tenía armas en la casa, insistió su abuelo el miércoles.
Por New York Post
“No me gustan las armas. No puedo estar cerca de las armas”, dijo a ABC News Rolando Reyes, de 72 años, cuya esposa recibió un disparo durante el ataque mortal del martes.
“No sabía que tenía armas… Si lo hubiera sabido, lo habría denunciado”, insistió el abuelo del joven de 18 años que fue asesinado a tiros en la Escuela Primaria Robb después de haber asesinado a 19 niños y dos educadores.
Reyes le dijo a la estación que tiene prohibido estar cerca de armas después de una condena por delito grave, sobre lo cual el medio no dio más detalles. “No puedo estar cerca de las armas”, confirmó.
“Odio cuando veo todas las noticias, todas esas personas a las que les disparan, estoy en contra de todo eso. ¿Por qué dejan que toda esta gente compre armas y todo eso?”, preguntó.
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