Las familias de dos niñas asesinadas en un crimen de honor y de otras cinco que fueron severamente torturadas a manos de ocho hermanos y primos por el embarazo extramatrimonial de una de las chicas encubrieron a los autores informaron hoy las autoridades de Darfur Este, en la parte occidental de Sudán.
El gobernador de Al Fardus en el Estado de Darfur Este, Hamdan al Masri, dijo en un comunicado difundido por la radio oficial sudanesa, Radio Omdurman, que ocho jóvenes, que son hermanos y primos de las menores, se llevaron a las siete niñas a un área remota y las torturaron por el embarazo de una de ellas fuera del matrimonio.
Al Masri agregó que las autoridades “habían recibido información sobre el crimen atroz a pesar de que las familias de las niñas intentaron encubrir el crimen”.
La fuente indicó que la Policía en Darfur Este ya ha arrestado a “cuatro jóvenes acusados de matar y torturar a las niñas mientras las familias de los restantes acusados prometieron entregarlos a la Policía en las próximas veinticuatro horas”.
Al Masri explicó que “las dos niñas, de 16 y 17 años, fueron asesinadas y otras cinco resultaron heridas el pasado domingo en la zona de Al Sary, en la provincia de Al Firdus, Darfur Oriental”.
Ocho jóvenes de un clan, que no fue identificado, habían acordado torturar a siete niñas de su familia por el embarazo fuera del matrimonio de una de ellas.
Los jóvenes llevaron a las siete niñas a un área remota y las sometieron a “duras torturas físicas, lo que resultó en la muerte de dos niñas y heridas graves a otras cinco”, según las autoridades sudanesas.
Cada año, varias niñas mueren en el Estado de Darfur Este por crímenes de honor.
El último caso ocurrió el pasado octubre cuando dos niñas murieron y tres resultaron heridas porque se sospechaba que “tenían un teléfono” en el área de Leyam de la provincia de Asalaya, en el estado de Darfur Este, habitado en su mayoría por la tribu árabe Rizeigat, que considera una vergüenza las relaciones extramatrimonianles entre chicos y chicas. EFE