“No viene. Tiene aún problemas por resolver con el hijo”. Con estas palabras confirman personas muy próximas a Zarzuela, y vinculadas a los servicios de seguridad de Casa Real, la decisión de Juan Carlos I de no viajar a Sanxenxo este fin de semana, tal y como estaba previsto y habían confirmado tanto el alcalde de la localidad pontevedresa como el presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo. La clave de este cambio de opinión, afirman estas mismas fuentes, está en la cumbre que mantuvo Felipe VI con su padre el pasado 23 de mayo.
Por VozPopuli
Tal y como informó Vozpópuli después de esa reunión, el Rey dejó claro al Emérito su malestar por el “show” vivido en Sanxenxo en los días previos a su encuentro y le trasladó que debía ser consecuente con la carta que ambos pactaron el pasado 7 de marzo. En la misma, Juan Carlos I afirmaba que “tanto en mis visitas como si en el futuro volviera a residir en España, es mi propósito organizar mi vida personal y mi lugar de residencia en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible”.
Esa formulación volvió a repetirse en el comunicado difundido por Zarzuela tras la cumbre entre los dos reyes. De esa forma, se mantenía abierta la puerta a un regreso definitivo del Emérito a España, pero siempre y cuando se produjera en esos “ámbitos de carácter privado” a los que se había comprometido Juan Carlos I dos meses atrás. Una condición que “no se podía cumplir este fin de semana” y que ha provocado la cancelación del viaje.
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