Al grito de “¡queremos trabajar!” docentes se apostaron este lunes frente a la Inspectoría del Trabajo “César Pipo Arteaga” de Valencia para denunciar la suspensión injustificada del sueldo a unos dos mil trabajadores del sector educativo en Carabobo.
Corresponsalía lapatilla.com
La secretaria de reclamos de Suma Carabobo, Angélica Flores, detalló que resultan afectados docentes, personal obrero y administrativo, quienes fueron despedidos indirectamente el pasado 10 de junio.
Precisó que en cada institución educativa del estado hay entre 5% y 10% de afectados con la medida.
“Son más de 2 mil trabajadores, de los cuales más de 1.500 están en condición de salud vulnerable, esperando junta médica, con incapacidad residual”, agregó.
Dianusa Soto, presidenta del Tribunal Disciplinario de Suma Carabobo, manifestó que la situación viene a agravar la crisis económica por la que atraviesan los docentes.
Destacó que el sueldo base de un maestro es de 300 bolívares al mes, pero ahora no podrán disponer de este dinero para comprar comida.
“Tenemos madres con tres o cuatro hijos que son las que sustentan la economía de su casa y el viernes se quedaron sin su salario. La crisis sigue aumentando y no tienen cómo mantener a sus familiares. Hay personas incapacitadas, que tienen hijos con discapacidad, embarazadas y el Ministerio de Educación les quitó su salario injustificadamente”, sostuvo.
Los docentes introdujeron un recurso de amparo ante la Inspectoría y esperan pronta respuesta. Además, exigieron a las autoridades de la Zona Educativa de Carabobo reunirse con los representantes gremiales y revisar detenidamente cada uno de los casos.