Dos personas han muerto después de que un automóvil eléctrico Nio cayera de la sede de la compañía en Shanghái. Un miembro del personal y un trabajador de una empresa asociada estaban dentro del vehículo cuando cayó desde el tercer piso el miércoles, informó la BBC.
Por Metro
Traducción libre de lapatilla.com
El incidente ocurrió alrededor de las 5:20 p. m. (hora local) en una instalación del tercer piso denominada sala de exhibición, área de prueba o estacionamiento.
Nio fue criticado después que describió el incidente como “no relacionado con el vehículo en sí” y luego lo corrigió como “no causado por el vehículo”, informó la BBC.
“Nuestra empresa ha colaborado con el departamento de seguridad pública para iniciar la investigación y el análisis de la causa del accidente.
Según el análisis de la situación en la escena, inicialmente podemos confirmar que se trató de un accidente (no causado por el vehículo).
Nos sentimos muy tristes por este accidente y nos gustaría expresar nuestras más profundas condolencias a nuestro colega y socio empleado que perdió la vida. Se ha creado un equipo para ayudar a las familias”.
Nio, una marca premium que hasta ahora ha realizado la mayoría de sus ventas en China, ingresó al mercado noruego en mayo del año pasado y planea lanzarse en Alemania, los Países Bajos, Suecia y Dinamarca antes de fin de año.
A principios de este mes, Audi de Volkswagen presentó una demanda en un tribunal de Munich contra Nio por una supuesta infracción de los derechos de marca registrada de Audi.
Según Audi, la decisión de Nio de nombrar dos de sus modelos ES6 y ES8 infringe la marca registrada de Audi para sus propias designaciones de modelo S6 y S8, informó el periódico alemán Handelsblatt.
Nio informó que en 2024 comenzaría a fabricar paquetes de baterías de alto voltaje que desarrolló para mejorar la rentabilidad y la competitividad para enfrentarse a rivales como Tesla.
Pronostica entregas de entre 23.000 y 25.000 vehículos en el trimestre que finaliza el 30 de junio, por debajo de los 25.768 del primer trimestre, lo que refleja una caída general en la producción de los principales fabricantes de automóviles como resultado de un confinamiento de dos meses por el covid-19 en Shanghái.