La ‘Mocromafia’, un conjunto de organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas que distribuyen por toda Europa y con base en Holanda, sigue dejando muertos, también en España. La Guardia Civil ha detenido a cinco miembros de esa potente mafia por el asesinato de uno de sus miembros el pasado mes de enero en Chiclana (Cádiz). La víctima Ebrahim Buzhu –de nacionalidad holandesa y origen marroquí-, a quien apodaban ‘el Carnicero’ fue hallada con un tiro en la cabeza.
Por abc.es
Los detenidos ejecutaron a su víctima de un disparo en la cabeza motivado por un ajuste de cuentas relacionado con el tráfico de drogas. Luego, trasladaron el vehículo en el que se habían desplazado hasta otro punto de la localidad para incendiarlo, con la intención de borrar pruebas.
‘El Carnicero’ había viajado con otro de los ahora detenidos desde Holanda días antes en coche porque había dado positivo en Covid y no pudo coger un avión. Llegaron hasta la Costa del Sol para preparar el envío de un cargamento de hachís y desde ahí se dirigieron a Chiclana.
En ese lugar los estaban esperando dos sicarios llegados expresamente para ejecutar a Buzhu, que había declarado contra uno de los líderes de la ‘Mocromafia’, ahora encarcelado. Los ejecutores estaban conchabados con el acompañante de la víctima y todos estaban relacionados con un potente caso de narcotráfico. ‘El Carnicero’ contaba con un larguísimo historial delictivo.
Los investigadores han llevado a cabo registros y detenciones en Chierry (Francia), Benalmádena y Alahurín el Grande (Málaga), y Guadiaro, San Martín del Tesorillo y Chiclana de la Frontera (Cádiz), en colaboración con las autoridades judiciales y policiales de Holanda y Francia.
A cargo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial, la investigación se inició en los dos escenarios con una minuciosa inspección ocular, donde apareció el cadáver, y el lugar donde fue hallado el coche.
El hecho de trasladar el vehículo utilizado hasta otro lugar de la población e incendiarlo, también desvelaba para los investigadores que se encontraban ante verdaderos profesionales del crimen.
La víctima realizaba actividades relacionadas con el tráfico de hachís entre la Costa del Sol, Holanda y Francia. Precisamente, los autores del asesinato se desplazaron desde Holanda hasta Málaga donde alquilaron el vehículo que posteriormente fue calcinado.
Tras identificar y localizar a cada uno de los implicados en la ejecución, los guardias civiles asignaron a cada uno de los objetivos el rol desempeñado en la organización, y procedieron a las detenciones incautando numerosos terminales móviles, documentación y material informático de gran interés para los hechos investigados.
A dos de los detenidos se les considera autores de asesinato, pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas y daños. Los otros tres detenidos están acusados de encubrimiento.
La operación Stoom ha sido llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cádiz, contando con el apoyo de diversas Unidades de las Comandancias de Cádiz, Algeciras y Málaga además de la Unidad Técnica de Policía Judicial, Grupo de Acción Rápida, tutelada por la titular del Juzgado Mixto nº 1 de los de Chiclana y coordinada con la Fiscalía de Cádiz. La investigación se ha desarrollado con la colaboración de Europol, así como de las autoridades judiciales y policiales de Francia y Holanda