La licenciada María Suárez, jefa de enfermería del Hospital Pastor Oropeza de Carora, en el estado Lara, fue esposada y retenida por un funcionario de la Policía del estado, identificado como Danny Cordero, por mandarle a poner el tapaboca.
Por: Corresponsalía La Patilla
La situación se registró la mañana de este jueves, al momento en que el funcionario, quien además estaba vestido de civil, iba a bajar a un paciente. La enfermera al percatarse de que el funcionario no cargaba la mascarilla, le pide que se la ponga pero el funcionario arremetió contra la licenciada, amenazándola con detenerla y la esposó sin ninguna orden, ni la presencia de una funcionaria femenina.
Luego del percance, el resto del personal que labora en el nosocomio caroreño se dirigió a la dirección general del centro asistencial, donde por más de dos horas mantuvieron retenida a la enfermera, sin la presencia del funcionario que la había agredido.
En medio de la molestia, el personal y representantes sindicales exigían la liberación de la enfermera, así como la eliminación del cuadrante de paz que funciona en el hospital.
Mery Gozález, representante del SUNEP-SAS, expresó su descontento por lo sucedido, al tiempo en que resaltó el esfuerzo que actualmente hace el personal de salud para laborar, quienes además de no contar con las condiciones mínimas para trabajar, tienen que soportar que los traten como delincuentes, los acosen y amenacen.
“Cuantas veces vemos a los policías en la calle poniendo multas de 30 y 40 dólares a los ciudadanos que no usan el tapabocas”, mencionó González para referirse al abuso de poder cometido por el funcionario, quien además usó improperios en contra de la enfermera.
Luego de dos horas retenida en la oficina de la dirección del hospital, la enfermera fue liberada y en compañía de un grupo de trabajadores, se dirigió a la Fiscalía del Ministerio Público a formular la denuncia sobre la situación presentada con el efectivo policial.