Corpoelec, donde la muerte acecha a sus trabajadores

Corpoelec, donde la muerte acecha a sus trabajadores

Corpoelec, donde la muerte acecha a sus trabajadores

 

 

 





 

La precariedad ensombreció a la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec). La carestía de condiciones mínimas de seguridad para trabajar sentenció a los trabajadores de la estatal a estar al borde de la letalidad. Según testimonios recabados, solo este año seis operadores murieron mientras hacían actividades técnicas. Sindicatos del sector responsabilizan a la empresa. Esgrimen, además, que las autoridades aplican un patrón de dejadez que se replica en casos de muertes y heridos. Para los trabajadores, la compañía los trata como un objeto desechable en el que «si te accidentas no le sirves», así lo reseñó TAL CUAL.

José Morillo (50), Jhonny y Rufo Russo fallecieron el 13 de marzo de este año, luego de que se desplomara una torre eléctrica sobre la que trabajaban en Yaracal, estado Falcón.

El 23 de ese mismo mes murió electrocutado Jorge Farah, supervisor de estaciones de Corpoelec, cuando intentaba corregir una falla en la subestación eléctrica Ezequiel Zamora, en el estado Monagas.

El 24 de mayo al registro de fallecidos se sumó un nuevo nombre: Alejandro Gómez Caporal, del eje costero Carabobo; sufrió un accidente cuatro días antes, mientras hacía maniobras en la subestación La Elvira, para atender una falla eléctrica que dejó por más de 18 horas a varios sectores de la entidad sin servicio.

La lista de trabajadores fallecidos del sector eléctrico este año la completa William Guerrero, quien recibió una descarga eléctrica el 28 de junio, mientras realizaba trabajos de reparación en el sector Sabaneta Norte de Montalbán, estado Carabobo.

Los sindicatos informan que en 2021 se registraron diez muertes por accidente laboral. Afirman que estos decesos son atribuibles a la falta de condiciones de seguridad con las que se les obliga, desde Corpoelec, a hacer las operaciones.

Aunque el Ministerio de Energía Eléctrica ha hecho propaganda a través de redes sociales sobre dotación de botas y uniformes a los trabajadores, los movimientos sindicales del sector desmienten a la cartera ministerial y a sus titulares. Afirman que lo que dan es mísero y no se apega a los estándares mínimos de seguridad.

Más detalles en TAL CUAL