Los vecinos del sector Carrochal de San Antonio del estado Táchira y decenas de motorizados que a diario transitan por la vía de mayor circulación entre los municipios Bolívar y Pedro María Ureña, deben soportar olores putrefactos por la acumulación de aguas servidas, aparte de los cráteres en la carretera que los obliga a cruzar por un costado de la calle.
Luz Dary Depablos // Corresponsalía lapatilla.com
Desde hace varios meses las aguas servidas circulan libremente por la vía y los alcaldes chavistas no han prestado atención a este grave problema que se agudiza cuando se registran lluvias, debido a que la zona es completamente llana. Allí se forma una laguna con fétidos olores que en algunas ocasiones impide el paso de motos.
Rómulo Rojas, concejal del municipio Bolívar, exige a los gobiernos locales una pronta solución, pues de mantenerse esta situación podría provocar enfermedades respiratorias y de la piel en la gente.
El anuncio del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, sobre la posible reapertura del comercio binacional entre Venezuela y Colombia por la frontera de Táchira, es la esperanza de los vecinos del sector Carrochal, pues consideran que podría ser la única manera de que sean escuchados por los alcaldes chavistas, y así reparen los drenajes de aguas servidas en este sector tan importante para el paso de camiones de carga pesada.
“Seguro ahí sí van a actuar porque, aunque es grave el problema de salud pública que esto nos pueda ocasionar, no han hecho nada por la comunidad”, manifestó, Alberto Gómez, vecino del sector.
Durante décadas esta ha sido la vía principal para el paso de mercancías formales que ingresaban por el puente internacional Francisco de Paula Santander y luego eran distribuidas en todo el territorio nacional, y por donde nuevamente pasarían en caso de abrirse la frontera para el comercio internacional, por tratarse de la única vía con la que cuenta la frontera para el paso vehicular después del puente internacional Tienditas.