El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo el miércoles que hablará con su par ruso por primera desde la invasión de Ucrania pero podría abordar otras prioridades, entre ellas la liberación de estadounidenses detenidos.
La conferencia telefónica con el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, será “en los próximos días” y “no será una negociación sobre Ucrania”, dijo Blinken a periodistas. Añadió que esencialmente estará centrada en la reanudación de las exportaciones ucranianas de cereales.
“Espero hablar de un tema que es prioridad para nosotros: la liberación de Paul Whelan y Brittney Griner que fueron detenidos erróneamente y deberían ser autorizados a volver a sus casas”, declaró.
“Hace varias semanas pusimos una oferta en la mesa de negociaciones para facilitar las liberaciones”, dijo Blinken sin dar detalles sobre lo propuesto.
El exembajador estadounidense en Moscú Michael McFaul instó al gobierno del presidente Joe Biden a cambiar esos detenidos por Viktor Bout, un traficante ruso de armas preso en Estados Unidos.
La basquetbolista Brittney Griner fue detenida en febrero en el aeropuerto de Moscú por llevar en su equipaje de mano “vaporizadores” y un líquido con aroma a aceite de cannabis, según las autoridades rusas. Griner se expone a una pena de 10 años de cárcel.
En tanto, el exsoldado estadounidense Paul Whelan y antiguo responsable de seguridad de una empresa de autopartes, está detenido desde 2018 en Rusia y condenado a 16 años cárcel por espionaje.
– Cereales –
Blinken señaló que espera hablar con Lavrov sobre el acuerdo alcanzado entre Kiev y Moscú para permitir la liberación de unos 25 millones de toneladas de cereales almacenadas en puertos ucranianos.
“Esperamos que ese acuerdo permita expedir rápidamente los cereales ucranianos por el mar Negro y que Rusia respete su promesa de permitir el pasaje de navíos”, dijo.
Kiev ha dicho varias veces que no confía en que Moscú permita la navegación segura y pone como ejemplo los misiles disparados el pasado fin de semana al puerto de Odesa.
El Kremlin, en tanto, dice no ver obstáculos para reanudar las exportaciones que, además, están complicadas por minas submarinas ucranianas utilizadas como defensa en caso de un asalto anfibio ruso.
El último contacto telefónico entre Blinken y Lavrov fue el 15 de febrero cuando el funcionario estadounidense expreso su preocupación por la entonces eventual invasión rusa a Ucrania. Nueva días mas tarde esa invasión se concretó y en represalia Washington y sus aliados impusieron sanciones a Rusia para aislarla internacional mente./AFP