¿Cómo puede valorarse la propuesta de María Corina Machado: para salir del régimen, hay que salir del G4? En primer lugar, para entender y comprender el porqué de este señalamiento es necesario tener claro el poder del régimen que enfrentamos y el poder de la “oposición” que hasta ahora ha fungido como interlocutora, los que nos permite tener una valoración clara de la capacidad para la acción política efectiva.
En primer lugar, el régimen ha manifestado de forma decisiva y sin escrúpulo alguno su disposición de no dejar el poder, y para esto ha minado gran parte de esa “oposición” de donde ha salido alacranato, falsas electorales, improductivos diálogos y negociaciones, lo que ha dado lugar a que el pueblo venezolano entienda que esa “oposición” representada en el G4 ya no tiene autoridad ni legitimidad para asumir el mandato de cambio que está demandando la sociedad venezolana.
En segundo lugar, el poder de la oposición depende en último término de la aceptación de su autoridad o de su legitimidad, sin duda alguna que el G4 no goza de ninguna de estas dos prerrogativas, de allí que la propuesta de María Corina Machado adquiere mucha significación, para salir del drama que vive el país, se requiere de una oposición que goce de estos dos prerrequisitos. Se requiere de una nueva oposición que responda con alternativas disponibles, con coherencia, firmeza y valentía para enfrentar al régimen que intenta someternos.
El G4 está cada vez más paralizado o es cada vez más ineficaz para pretender seguir abrogándose la potestad de ser el representante de la oposición (entendida esta como la gran mayoría de los venezolanos que demandan una salida del actual régimen).
La propuesta de María Corina machado, recoge sin duda alguna, la relación tensa y tirante con esa mal llamada oposición del G4 y los grupos sociales que demandan, entre otras cosas, una posición firme y decidida que conduzca a la salida a la actual pesadilla que vive el país, su propuesta no hace más que exponer al debate y al conflicto político el clamor de los venezolanos decepcionados de esa clase política y de la cual han llegado al convencimiento que mientras estén al frente se hace más difícil de salir de este drama.
Muchos son los que hoy critican esa “oposición”, María Corina se ha convertido en la interprete de ese sentimiento, ha asumido, como líder, la responsabilidad de ser la voz de millones de venezolanos que manifiestan su frustración, que demandan una política digna que desarrolle un proceso de decisión política orientado a la salida del régimen del poder.
El compromiso que plantea María Corina Machado es con una oposición fuerte que proporcione las bases seguras sobre las que, se cree, confianza y los lazos seguros de donde prosperaran todas las manifestaciones orientadas a la liberalización de Venezuela. Se requiere el poder para una oposición con el compromiso de transformar el orden de cosas existentes.
Los momentos vividos imponen la construcción de una nueva oposición política, de acuerdo con un plan que nos permita el rescate de nuestra libertad, unidos con todos aquellos venezolanos que el único plan que guía nuestra razón: es liberar al país de esta tragedia. Una oposición que demande la libertad del país, que vele ininterrumpidamente por permanecer unida y evite que el régimen pueda minarla para imponer su propósito de no permitir acercarse ni entenderse para presentar una resistencia común, y así el régimen solo poder enfrentarse a un número de hombres aislados de todos los demás. Se requiere pues, de una oposición que haga el esfuerzo para acercar a la sociedad venezolana y unirla en nuestro verdadero propósito: la salida del régimen y transformación del país, María Corina ha demostrado que tiene la moral y el coraje para hacer el llamado.