El juez magistrado federal de Florida que firmó una orden de allanamiento que autorizaba la redada del FBI en el complejo Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump dejó la oficina del fiscal federal local hace más de una década para representar a los empleados del pedófilo convicto Jeffrey Epstein que había recibido inmunidad. en la larga investigación de tráfico sexual del financiero.
Por New York Post
Las fuentes le dijeron a The Post que el juez Bruce Reinhart aprobó la orden que permitió a los agentes federales converger en la propiedad palaciega del sur de Florida el lunes en lo que Trump llamó una “redada no anunciada en mi casa”.
Reinhart fue elevado a juez de instrucción en marzo de 2018 después de 10 años en la práctica privada. Ese noviembre, el Miami Herald informó que había representado a varios de los empleados de Epstein, incluidos, según la propia admisión de Reinhart al medio, los pilotos de Epstein; su programadora, Sarah Kellen; y Nadia Marcinkova, a quien Epstein describió una vez como su “esclava sexual yugoslava”.
Kellen y Marcinkova se encontraban entre los lugartenientes de Epstein a quienes se les otorgó inmunidad como parte de un controvertido acuerdo de 2007 con los fiscales federales que permitió que el pervertido se declarara culpable de cargos estatales en lugar de delitos federales. Epstein terminó cumpliendo solo 13 meses en la cárcel del condado y se le concedió permiso para trabajar.
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