Los medicamentos que llegan al país desde la India, Irán y China no están pasando por el control de calidad y han generado reacciones inesperadas en quienes los consumen. El sector farmacéutico viene mostrando su preocupación ante esta situación y ha advertido sobre la eliminación del registro sanitario exigido para su comercialización en Venezuela.
Por Jhoanna Suárez | La Prensa del Táchira
Las quejas sobre la efectividad de estos fármacos tampoco se han hecho esperar. Las denuncias en redes sociales y medios de comunicación hablan de reacciones desfavorables al consumir estos productos.
Yaneth Gómez, usuaria de Twitter, comentó que su esposo toma losartán potásico y adquirió una marca de la India, luego de empezar a tomarla pasaron varios sustos con la tensión. “Se le subía constantemente. Compramos otra marca y tensión normal”.
En Táchira, un menor de 5 años recibió el medicamento equivocado y casi le cuesta la vida. El hecho ocurrió en junio, cuando el menor ingresa a la emergencia del Hospital Central con convulsiones luego de que le fueran suministradas unas gotas que sus padres adquirieron en una farmacia móvil en San Cristóbal.
Alerta
Desde el año 2021, la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven) viene alertando que las farmacias del Estado no cumplen con los requisitos establecidos en la Ley de Medicamentos.
Sergio Delgado, presidente del Colegio de Farmacéuticos del Táchira, manifestó su preocupación y agregó que además de no contar con un control de calidad estos medicamentos se están resguardando en espacios inadecuados, lo que sin duda repercute en su efectividad, refiriéndose también a los que ingresan por vías irregulares desde Colombia.
Riesgo
Consumir fármacos que no tengan un correcto almacenamiento y traslado puede generar efectos adversos o no cumplir su función terapéutica. “Si son expuestos a luz y calor pueden causar diarrea, vómito, taquicardia y hasta la muerte, o bien pueden actuar como una sustancia inocua”, dijo el médico, Ramón Rodríguez.
Aclaró que en el empaque los fármacos no sólo muestran su contenido, también tiene recomendaciones de conservación, si estas no se respetan se afecta la farmacocinética y la farmacodinámica. “Es un asunto muy delicado que implica un riesgo a la salud. Todo medicamento tiene un protocolo”.
Efectividad del fármaco en riesgo
Para Ender Colmenares, farmacéutico y dueño de una droguería en Táchira, la mayor preocupación en estos momentos son las condiciones en las que se están resguardando y expendiendo estos medicamentos.
“Todos los medicamentos deben resguardarse en condiciones ya establecidas, por eso cuando una persona va a instalar una farmacia, la permisología y los ítems que tiene que cumplir para que funcione son muchos, estructura, piso, techo y climatización. Preocupa es que en estas cavas no se cumple ninguna de las condiciones ni siquiera cuenta con un regente”, dijo.
El hecho es que el producto puede cambiar su estructura molecular y dependiendo de la molécula, podría ser nocivo o perder su efecto.
Sin personal preparado
El representante del gremio farmacéutico en el Táchira, Sergio Delgado, se refirió a la falta de personal calificado en las unidades móviles como otra falencia de este programa implementado por el Estado.
“Además de no contar con un regente farmacéutico como lo establece la norma, la mayoría de estos fármacos no vienen en el idioma español y los expendedores disponibles no están capacitados para adivinar, lo que representan un riesgo adicional para el paciente.
Quienes hemos estudiado para ello, sabemos cuándo un medicamento es de dudosa procedencia, y si hay algún reclamo el farmacéutico debe responder, pero en caso de reclamo a dónde se puede acudir en una unidad de estas”, dijo.