Trabajadores del Consorcio Veinca, empresa que funciona en el Matadero Industrial Roblecito de Valle de La Pascua, municipio Leonardo Infante del estado Guárico, decidieron detener sus actividades por la falta de pago y equipamiento óptimo para su desempeño diario.
Por Corresponsalía La Patilla
En este sentido, Miguel Hernández, vocero de los manifestantes, indicó que la mayoría del personal tiene más de un mes que no cobra sus quincenas, sin recibir argumentos razonables por parte de la compañía.
Dijo que luego de varios días de denuncias, acudieron al lugar funcionarios de la gobernación chavista de la entidad y representantes de la organización, pero siguen sin recibir respuestas favorables a sus exigencias.
“Paramos actividades, no por que somos flojos, es porque Veinca lleva más de dos quincenas que no paga el salario a los obreros y más de tres quincenas que no cancela a los trabajadores administrativos. La única respuesta es que tienen muchas deudas y eso no es problema de nosotros. No nos interesa si la compañía no tiene recursos, lo que nos interesa es trabajar, porque hicimos un compromiso, y si nosotros trabajamos una quincena, la empresa debe pagarnos”, apuntó.
De la misma manera, Hernández manifestó que el entorno laboral es lamentable, ya que no cuentan con los equipos necesarios para efectuar sus deberes. A su vez, no perciben prestaciones sociales ni otros beneficios.
“No es justo que no tengamos beneficios laborales, no estamos inscritos en el Seguro Social. Además, las condiciones laborales son deplorables, muchos compañeros deben colocarse bolsas en el pecho para no llenarse de sangre mientras trabajan. Solo tenemos transporte en la mañana para ingresar a laborar. En la tarde debemos irnos a pie, en cola, corriendo y estamos fuera del perímetro de la ciudad. Es intolerable “, reveló.
El portavoz solicitó a los responsables tomar cartas en el asunto y mejorar sus condiciones laborales, ya que el personal se mantiene presto a brindar el 100% de su rendimiento bajo los contextos adecuados y necesarios para un obrero.
“Necesitamos una empresa que sea sólida, responsable y que esté en capacidad de trabajar, de producir con la masa trabajadora, que se comprometa con nosotros y que por lo menos sea responsable y no mediocre”, puntualizó Hernández.