La alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, confesó hoy que las presiones para no publicar un informe sobre los derechos humanos en China han sido muy fuertes, pero aseguró que nada de eso disuadirá a su organismo de divulgarlo.
El informe se centra en la situación de los derechos humanos de los uigures, una minoría asentada en la provincia noroccidental de Xinjiang y que el Gobierno chino ha reprimido por décadas porque considera que es un vivero para el extremismo, al punto que en 2018 se descubrió que había creado gigantescos campos de internamiento para “reeducarlos”.
Bachelet reconoció que había recibido una carta firmada por unos cuarenta países que le pedían que no publique el informe que su oficina prepara desde hace un par de años sobre esa situación y cuya elaboración se retrasó cuando el Gobierno chino aceptó que la alta comisionada visitara el país el pasado mayo.
Según Bachelet, esa visita era prioritaria porque era una oportunidad única para ver de primera mano lo que ocurría en el país y tener un contacto directo con familiares de uigures que estuvieron o están en esos campos de internamiento.
La alta comisionada dijo que a la vez había tenido “une enorme cantidad de reuniones” con representantes de países que le pedían publicar lo antes posible el referido informe, lo que hace varios meses prometió que haría antes de concluir su mandato al frente de la mayor estructura internacional de derechos humanos y que expira el próximo día 31.
En una conferencia de prensa en la que hizo un balance de su gestión, Bachelet indicó que se están revisando los comentarios efectuados por el Gobierno chino al informe, un procedimiento habitual para este tipo de publicaciones y con el que se busca corregir inexactitudes o valorar medidas que podrían no haberse tomado en cuenta.
“Los asuntos (que contiene el informe) son graves y son analizados a fondo”, adelantó Bachelet, tras asegurar que intentará honrar su promesa de sacarlo a la luz antes de despedirse de su cargo.
“Las presiones no definirán como serán las cosas”, aseguró. EFE