Los príncipes Jorge, Carlota y Luis, los hijos de los duques de Cambridge, han empezado las clases en el nuevo colegio privado Lambroke, ubicado cerca de la casa donde la familia vive ahora en Windsor, a las afueras de Londres.
Los tres pequeños llegaron el miércoles de la mano de sus padres para el primer día de clase en Lambroke, donde fueron recibidos por el director, Jonathan Perry, que les dio la mano a cada uno, según las imágenes divulgadas este jueves por los medios.
Al llegar al portal de la escuela, Perry preguntó a Jorge, Carlota y Luis si estaban animados para empezar el colegio, a lo que los tres contestaron al mismo tiempo con un “¡Si!”.
La jornada de ayer estuvo dedicada a explicar a los alumnos la dinámica de sus clases y para que los menores pudieran familiarizarse con el entorno escolar y los compañeros.
Según la BBC, solo se permitió ayer la presencia de una cámara de televisión y un fotógrafo para captar el momento de la llegada de los duques y sus hijos, a fin de que a partir de ahora los pequeños puedan asistir a clase alejados de la atención mediática.
Los duques de Cambridge, William y Catalina, iniciaron una nueva etapa en su vida familiar al mudarse recientemente a una casa ubicada en los terrenos del castillo de Windsor.
Guillermo y Catalina, que hasta hace unas semanas residían en el palacio de Kensington, en Londres, viven ahora en Adelaide Cottage, una vivienda del siglo XIX con cuatro habitaciones, por lo que no habrá espacio para tener a personal adicional que viva con ellos.
Los príncipes Jorge y Carlota acudían hasta el último año académico en el colegio Thomas’s Battersea, en Londres.
Los duques han optado por residir en Adelaide Cottage -a diez minutos andando del castillo de Windsor- después de que la reina Isabel II, de 96 años, otorgase el permiso para su uso, puesto que es una vivienda en poder de la Corona.
Los duques han decidido conservar el apartamento donde han residido en Kensington como su oficina y donde su personal seguirá trabajando, así como la casa de campo Amber Hall que tienen en el condado de Norfolk, al este de Inglaterra, y que fue un regalo que les hizo la reina Isabel II tras su boda en 2011.
Por primera vez, la niñera de los príncipes, la española María Teresa Turrión Borralo, no vivirá con la familia.
Se estima que los duques pagarán unas 53.000 libras (61.308 euros) anuales en las matrículas de sus hijos.
La escuela está a unos 20 minutos en coche desde Adelaide Cottage, una vivienda que tiene historia por ser el lugar donde vivió el capitán Peter Townsend, cuya relación con la princesa Margarita, hermana de Isabel II, provocó un escándalo en los años cincuenta del siglo pasado.
Adelaide Cottage está también cerca de la casa donde viven los padres de la duquesa de Cambridge, en la localidad de Bucklebury, en el condado de Bershire. EFE