El huracán Fiona tocó tierra este domingo en el sur de Puerto Rico, dos días antes del quinto aniversario de la llegada del huracán María que devastó la isla.
Fiona, que ya ha sumido a todo este territorio estadounidense en la oscuridad, tocó tierra a las 15H20 (19H20 GMT) cerca de Punta Tocón (suroeste), informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
El huracán avanza con vientos de hasta 140 km/h. De momento es de categoría 1, la más baja de las cinco en la escala de Saffir-Simpson, pero se espera que “se fortalezca aún más en las próximas 48 horas”, indicó el NHC.
El temporal ha provocado un apagón general en la isla desde poco después de las 13H00 (17H00 GMT), informó la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico, la corporación pública a cargo de la generación de electricidad.
Esa entidad ya ha conseguido reiniciar varios generadores, un primer paso hacia el restablecimiento de la red eléctrica, indicó su director, Josué Colón, en una entrevista televisiva.
Según los protocolos establecidos, una vez logre reactivar esa red, la autoridad intentará restablecer primero el servicio a hospitales y otros edificios gubernamentales que ofrecen servicios esenciales.
Ríos desbordados
El río Grande de Loiza y el río Cagüitas, en el norte y centro de la isla, se desbordaron en algunas áreas, informó en Twitter el Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos.
“Las comunidades a lo largo de estos ríos, deberían considerar moverse a un lugar más alto de inmediato”, añadió.
Según medios locales, otros ríos se desbordaron en el sureste de la isla, inundando carreteras y zonas urbanas, y en la montaña y la zona suroeste, varias familias han perdido el techo de sus casas por las ráfagas de vientos y han tenido que cobijarse en refugios habilitados por el gobierno.
Por la mañana, el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, instó a la población a refugiarse.
“Le pedimos a nuestro pueblo que se mantenga en su hogar y que busquen refugio si lo necesitan. Continuamos bajo un aviso de huracán”, declaró en rueda de prensa. “Por su tamaño, esta tormenta va a estar impactando a todo Puerto Rico”, añadió.
Pierluisi anunció la suspensión de las clases en las escuelas el lunes, ante pronósticos de que las lluvias continuarán.
También canceló el trabajo de los empleados gubernamentales, excepto aquellos que ocupan puestos críticos o que proveen servicios esenciales durante la emergencia.
El presidente estadounidense, Joe Biden, aprobó el domingo la declaración del estado de emergencia en Puerto Rico, una medida que permite liberar fondos federales para las labores de ayuda.
La antigua colonia española se convirtió en territorio estadounidense a fines del siglo XIX antes de obtener el estatus de estado libre asociado en 1950.
“Estragos”
Las autoridades anticipan lluvias de 20 a 25 pulgadas (de 508 mm a 635 mm) en áreas aisladas de Puerto Rico, una cantidad bastante inferior a las cerca de 40 pulgadas registradas durante el huracán María, que azotó el territorio caribeño hace casi cinco años.
“Podemos esperar que haya estragos, pero no al nivel de María”, dijo Ernesto Morales, del NWS, en la misma rueda de prensa que el gobernador.
A raíz de María, Puerto Rico quedó incomunicado y grandes áreas estuvieron sin electricidad durante meses. Casi 3.000 personas murieron a consecuencia del desastre, según el balance oficial.
Fiona ya causó graves daños a su paso por Guadalupe el viernes por la noche. En algunos lugares, el agua subió a más de 1,50 metros en ese territorio francés. Un hombre murió allí, arrastrado con su casa por la crecida de un río.
El calentamiento de la superficie de los océanos aumenta la frecuencia de los huracanes más virulentos, con vientos más fuertes y lluvias más intensas, según expertos.
AFP