“Nunca he tocado la política y ahora me enfrento a la cárcel”, contó la modelo Veronika Loginova, que tiene más de 550 mil seguidores en la red social que está prohibida en el país desde marzo
Una influencer rusa de 18 años podría enfrentarse a seis años de cárcel luego de que su cuenta de Instagram fuera calificada como “actividad extremista” por la Fiscalía Interdistrital de Kuntsevskaya, Moscú, por “realizar acciones para atraer usuarios a las redes sociales Facebook e Instagram”.
Por Infobae
Veronika Loginova tiene 556.000 seguidores en Instagram y se encuentra en riesgo de ser encarcelada a pesar de no publicar contenido político.
Entre lágrimas, la joven publicó recientemente un video donde contó su situación: “Cualquier día los fiscales pueden ir a tu casa. Nunca he tocado la política y ahora me enfrento a seis años de cárcel… por usar Instagram. Buenos días, te has despertado en Rusia. Y aunque no hablemos de esas cosas, seguiré hablando”.
Aunque Instagram y Facebook están prohibidos en Rusia desde marzo -bajo la acusación de que “realizaban actividades extremistas”-, siguen siendo ampliamente utilizados por la élite del país y sólo se puede acceder a ellos utilizando los servicios VPN (programas antifiltros de internet).
En ese contexto, según el relato de Loginova, dos fiscales del Estado llamaron a su casa hace unos días y le advirtieron que “destaca demasiado” en Rusia, ya que tiene una audiencia de más de 1,1 millones entre sus cuentas de Instagram y YouTube.
Fue entonces que la influencer decidió hacer un descargo en las redes sociales sobre estos cuestionamientos de las autoridades rusas. “¿En serio, a mí? ¿Una bloguera de moda de 18 años? ¿Una empresaria, creadora de mi propia marca de ropa que paga impuestos a su propio país ¿Una persona que escribe posteos sobre el apoyo a la salud mental y que nunca ha tocado una agenda política en su blog? Sí. Ahí lo tienes. Vives, haces fotos bonitas, creas un negocio, ayudas a la gente, no tocas a nadie. Pero vives en Rusia y, entre un millón de blogueros, vienen a ti. ¿Qué hago ahora? ¿Renunciar a Instagram? ¿Huir de Rusia? ¿Demandar?”, dijo Veronika Loginova.
La exitosa influencer comenzó con sus posteos a los 15 años y la cantidad de seguidores ha ido aumentando exponencialmente.
“Voy a llegar al fondo del asunto y a cubrirlo aquí”, advirtió en Instagram, y afirmó que no sentía miedo por la amenaza. “Por suerte, tengo el apoyo de gente que entiende que esto no es normal. Esto está mal y quiero que la mayor cantidad de gente posible conozca esta historia. Así que pido a todos los que tienen voz, a todos los que tienen aunque sea un seguidor, que lo compartan y que digan que esto NO es normal”.
Por otra parte, varios medios internacionales notaron que hay miembros de la élite del Kremlin que también usan Instagram y, sin embargo, no han sido perseguidos por este tipo de leyes del gobierno de Vladimir Putin. Por ejemplo, Ksenia Shoigu, de 31 años e hija del ministro de Defensa Sergei Shoigu, recientemente compartió en la plataforma unas fotos en topless con su amante, el bloguero deportivo Alexey Stolyarov, de 32 años. Y la patinadora olímpica Tatiana Navka, de 47 años y esposa del vocero del Kremlin Dmitry Peskov, también fue criticada por su uso constante de Instagram aunque no se enfrenta a ninguna amenaza de cárcel.