El presidente de Colombia, Gustavo Petro, visitó este domingo la isla caribeña de San Andrés para evaluar la situación tras el paso del huracán Julia, de categoría uno, que el sábado por la noche dejó “daños leves”.
“Estoy en San Andrés Islas, evalúo daños y sobre todo el sistema de prevención y resiliencia de la isla”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
El director general de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), Javier Pava, informó esta mañana que el paso de Julia dejó dos heridos y daños materiales, entre ellos dos viviendas destruidas y 101 averiadas, así como la caída de árboles en la isla, la principal del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
Para atender las necesidades de la población isleña y del departamento de La Guajira, en la Costa Atlántica, también golpeado por las lluvias y los vientos causados por Julia, el Gobierno dispuso el envío de 23 toneladas de ayuda humanitaria, informó la Fuerza Aérea Colombiana.
Julia puso en alerta al archipiélago, situado a unos 700 kilómetros de la Colombia continental, que en 2020 fue duramente golpeado por el huracán Iota, de categoría cinco, que destruyó prácticamente todas las infraestructuras de Providencia.
REANUDACIÓN DE LOS VUELOS
Por su parte, la Aeronáutica Civil informó que tras verificar las condiciones de seguridad, hoy se reactivaron las operaciones aéreas en los aeropuertos de San Andrés y de Providencia, que volvieron a la normalidad tras la suspensión ordenada el pasado viernes debido al paso del huracán.
Durante los dos días que el tráfico aéreo estuvo suspendido en el archipiélago debido al paso de Julia fueron cancelados 45 vuelos y 8.864 pasajeros fueron reacomodados, informó la Aeronáutica Civil en un comunicado.
Se calcula que entre este domingo y el lunes cerca de 6.430 pasajeros salgan de la isla en 41 vuelos y cerca de 7.000 viajeros lleguen en las próximas horas.
Julia se ha debilitado hasta convertirse en una tormenta tropical que atraviesa Centroamérica, donde también ha causado graves estragos, especialmente en Nicaragua, hacia donde se dirigió tras pasar por San Andrés y Providencia.
En este sentido, la región Caribe de Nicaragua, que abarca casi el 50 % de la extensión del país y donde habita aproximadamente un millón de personas, quedó sin energía eléctrica y sin telecomunicaciones. EFE