Dentro de las coronaciones de los monarcas en Reino Unido hay una sección, de las más largas de la ceremonia, que se conoce como ‘El homenaje’. En ella, los nobles de todas partes del territorio sobre el que reina el nuevo soberanos se alinean en fila y le hacen honores como muestra de lealtad. Pero parece que Carlos III tiene en mente que esto sea un mero trámite corto, porque pocos aristócratas irán a su coronación.
Por 20minutos.es
Ahora que se sabe que esta tendrá lugar el 6 de mayo de 2023, sin que haya quedado claro si es un guiño o un fastidio hacia su hijo, el príncipe Harry, pues coincide con el cumpleaños del pequeño Archie, se van conociendo poco a poco los detalles de una fecha que a buen seguro distará de la que protagonizó su madre, Isabel II, hace aproximadamente 70 años.
Según ha revelado Mail on Sunday, Carlos III dará prioridad en su coronación a las organizaciones caritativas y sus trabajadores antes que a parte de la aristocracia por lo que, añaden, parte de la jet set británica tendría que participar en un sorteo para asegurarse un asiento en el evento, del que ya se sabe que será más austero y moderno, en consonancia con los aires que pretende darle el nuevo monarca a la familia real.
Añade la citada publicación que varios expertos publicarán próximamente un nuevo informe sobre lo que Reino Unido debe esperar de ese día y que se trata de un estudio extraído de varios años de investigación, centrados en la planificación de la Operación Golden Orb, nombre en clave de esa fecha.
Dichos expertos son todos académicos de la Unidad de Constitución del University College London (UCL) y se han basado en las entrevistas que durante décadas les han realizado a miembros de la realeza. Según dice el citado medio, dicho informe “va a revelar una visión fascinante de la ardua planificación involucrada”.
“Inevitablemente tendrá que haber muchos cambios en la próxima coronación, sobre todo porque ha habido una enorme alteración del estatus de la aristocracia en los últimos 70 años”, ha explicado al diario el Dr. Bob Morris, uno de los integrantes de la Unidad de Constitución de la UCL y autor de Inauguración de un nuevo reinado: planificación para la adhesión y la coronación.
Ha añadido que, al no crearse ya “pares identitarios” y salvo por los 90 que aún se mantienen entre los Lores, la aristocracia y la nobleza han dejado de tener una función legislativa, lo que haría prácticamente injustificable una concurrencia masiva de nobles y aristócratas a la ceremonia, al contrario de lo que aún ocurría en 1953. “El Rey ha dejado claro que es consciente de que vivimos tiempos difíciles, y que su coronación tendrá que reflejarlo”, ha finalizado.